Nightclub School Hospital

Como siempre, tenía que ser China el lugar de donde surjan las ideas para remontar las crisis de liquidez que padecen los estamentos públicos. Es de sobra conocida la situación de la sanidad en España: paupérrima y con serias dudas sobre su futuro. Así que toca renovarse o morir, buscar soluciones que no pasen por el recorte. Y fijaos cual podría ser la clave, convertir nuestros hospitales en disco bares y abrirlos como escuelas en horarios coincidentes. Pastilleros, médicos y estudiantes reunidos en un mismo lugar, ¿no suena idílico?

Bromas aparte, fijaos que Nightclub School Hospital presenta una escandalosa mezcla capaz de situar las locuras netamente chinas – no producidas en Hong Kong – a la altura de cualquier experimento bizarro japonés. Viendo el tráiler, alguno incluso podría pensar que supera, en nivel de demencia, a las recientes producciones splatter de Nishimura y compañía. Vayamos por partes. Se nos presenta como una cinta netamente slasher, pero por lo que vemos, la estética bebe del acabado propio de un manga con cierto toque grindhouse, sin tomase en serio ninguna de esas dos facetas. Además tenemos dentro del coctel unos elementos fantásticos nada desdeñables y que no casan fácilmente con el discurso de una película de psicópatas al uso: tiroteos, emanaciones extraterrestres, Michael Jackson y científicos locos. Pero por si fuera poco, queda el ingrediente absolutamente incongruente del mejunje; según las imágenes más estrafalarias y foscas, Nightclub School Hospital va a tener su buena dosis de videoclip y baile, algo que podíamos esperar sabiendo que parte del encanto del escenario donde se ubica la acción, vendría a ser su condición de hospital-discoteca. Así, a bote pronto, parece que hereda muchas ideas del Rocky Horror Show, pero interpretadas de forma absolutamente oriental.

Por desgracia, la información que manejamos no es muy precisa. Ni siquiera sabemos si el título traducido del chino es exacto – parece como si algo se hubiera perdido en la translación –, tampoco existe una sinopsis oficial que aclare las epatantes escenas que nos ofrece el tráiler. Lo seguro es que estamos ante una cinta de horror, con mucho de comedia, que busca la internacionalización de su cine, mirándose en el reflejo de sus primas cercanas (el terror cómico de Corea del Sur, Tailandia y Japón).

Hace muy poco, nuestro querido compañero Asier nos trasladaba su preocupación sobre la posible saturación que se estaba produciendo en la industria cinematográfica, con esto de mezclar humor y horror. La verdad que el género puro, en especial la acera del miedo, aguanta estos duros tiempo como bien puede, y parece que el reclamo de suavizar lo puramente terrorífico, para atraer cuanto más público mejor, se extiende cual reguero de pólvora. No obstante, creo que siempre ha funcionado bien esta mezcla, y que películas señeras de nuestro amado género (¿os acordáis de un señores llamados Peter Jackson y Sam Raimi?) se basan precisamente en esta mezcla; cualquiera que eche una mirada mental a los títulos clave de “la era del videoclub” verá que la seriedad no era la insignia de la sección con dos rombos. Quizás el problema moderno sea que el equilibrio entre risas y escalofríos esté peor medido cuanto más actual sea la producción, que los realizadores no hagan un esfuerzo real por acotar el humor a momentos puntuales y conviertan a sus obras en meras comedias con bromas sobre el mundillo del terror.

Sea como sea, con Nightclub School Hospital seguro que tenemos momentos surrealistas e incongruentes que, dada la atmosfera infecta de un hospital marchoso, nos entretengan mientras obviamos el devenir de un género, el terror, que podrá ser peor o mejor, pero como las cucarachas, siempre sobrevivirá… hoy podrán comprobarlo los asistentes al estreno en su país natal.