Estás aquí: Página de inicio » Noticias » [REC] 3: Pase de prensa y entrevistas

[REC] 3: Pase de prensa y entrevistas

Conversamos con el equipo de [REC]3 en el preestreno de la película

Quiero expresar mi agradecimiento a Rubén Navarro, autor de las fotografías que acompañan a este artículo. Podéis seguir su trabajo en Flickr.

La productora reunió a la prensa el pasado 28 de marzo en los célebres cines Verdi Park de Barcelona para asistir a la proyección de [REC]3 y a la posterior sesión de entrevistas. El director Paco Plaza, los protagonistas: Leticia Dolera, Diego Martín y Àlex Monner, y el productor Julio Fernández, posaron para los medios bajo un sol abrasador en un photocall improvisado en la calle.

Accedimos a conversar con Paco, Leticia, Diego y Àlex sobre el rodaje y las claves de la película. También hablamos con Jaume Balagueró, a quien robamos unos minutos antes de la premiere. A continuación una transcripción de estos encuentros con el equipo.

Paco Plaza

¿La auto-parodia era algo que tenías en mente desde el principio?
La verdad es que no. Ni la parte romántica tampoco. No era algo que guiase la escritura del guión, era más bien al revés, la propia película nos lo iba pidiendo. Solo se nos ocurrían cosas graciosas con Luiso Berdejo. Un día llegaba y me decía: Un tío disfrazado de Bob Esponja…Y yo le decía: “¡Pero no nos van a dar los derechos!” Y él: “Pues en lugar de Bob, le llamamos John”. Todo esto mientras nos partíamos de risa. Muchas veces, las películas no solo cogen el espíritu del rodaje, sino de todo lo que ocurre antes en la escritura. Esta película la escribimos viendo el Mundial en Los Ángeles, donde vive Luiso. Imagina la situación, mejores amigos desde hace 15 años, que se ponen a ver el Mundial y entre medio escriben el guión. Ese tono festivo se acaba transmitiendo, la alegría y la pretensión de querer hacer una película que sea un festival, con la que la gente se lo pase bien y se ría.

¿La idea de romper con la cámara en mano responde solo a la voluntad de refrescar la saga o también a la de alejarse del boom de found footage usado en el género últimamente?
Yo creo que ninguna forma de contar se agota. Si encuentras la historia que tiene que ser contada de esa manera, la forma no se va a agotar. Lo que no puedes hacer es estirar una fórmula porque sí. Si algo conectó de [REC] con la gente era que, de alguna forma, estaba contando de una forma diferente a lo que te esperabas y de cómo tiene que ser contada una historia de terror. Lo más honesto era hacer un [REC] como se supone que no se hace un [REC], volver a rodar como rodaba Sam Raimi o Peter Jackson hace quince años, al terror de los 80 y 90, que es lo que nos ha educado sentimentalmente. Volver a hacer cine a la manera que se hacía antes. La idea de ser muy conservadores para, en realidad, ser más transgresores.

Sin perder la esencia.
Claro, tiene que ser [REC], tener sus señas de identidad. Tiene que ser lo mismo pero no tener nada que ver. “Es lo mismo, pero no es igual”, como decían Martes y Trece (risas).

Es un tipo de película muy de Sitges, que invita a gritar y aplaudir durante la proyección.
Es que yo soy público Sitges y al final acabas haciendo las películas que a ti te gustaría ver. De hecho, si no se hubiera retrasado todo, lo previsto era estrenar en Sitges.

En esta tercera entrega, más que en las anteriores, le das mucha importancia a lo que viven y sienten los personajes.
El funcionamiento de una película de género se basa, sobretodo, en que te importe lo que les ocurra a los personajes. Hay películas que los descuidan y esas son las que no funcionan. Si nos gusta el cine de terror, no nos gusta por ver un tío con careta, sino porque te importa lo que les pase a esas personas. En ese sentido, creo que es un cine en el que hay que cuidar especialmente a los actores. En este caso, fue muy fácil porque son muy buenos actores y ya desprenden de por sí una humanidad que conecta contigo, te caen bien y no quieres que les pase nada malo.

Hablando de personajes, Atún es uno inolvidable, icónico.
Atún es absolutamente genial. Es una especie de alter ego que cuelo en la película y va diciendo las cosas que a mí me gustaría decir. Tiene esa especie de irreverencia hacia la película, hace muchos chistes sobre ella misma. Es muy referencial y hace mucho guiño. Es una pequeña sonrisa hacia la crítica seria que nos trató muy bien con la primera película. Me gusta mucho cómo funciona Atún a ese nivel, como si yo me metiera en la película para dinamitarla.

Con todo ese aprecio que le tienes, entiendo que no le ‘infectaras’.
Es que me sabía muy mal. Él no iba a permitir convertirse en uno de esos bichos, quería morir con dignidad. Me da mucha pena que muera por gordo, es muy triste. Me cayó una bronca de mi madre por eso. Atún mola mucho, se le coge mucho cariño, desde el minuto uno, cuando lo ves todo flipado con la steadycam. Mola mucho la relación con Adrián también. Además, esa relación fue real fuera del rodaje. Álex iba y le preguntaba: “Oye, pero ¿qué es cinema verité?”, y Borja se lo explicaba a modo de mentor.

¿Tuvisteis algún problema con la SGAE en relación al personaje de Canon?
No, pero te voy a contar una cosa sobre eso. Pedí que me dejaran usar el logo de la SGAE para ponerlo en la libreta que lleva Canon y no me dieron permiso. Y yo soy socio de SGAE (risas).

Igual que en [REC], en esta nueva entrega hay una paleta de personajes muy costumbrista.
Sí, pero no como voluntad de retratar nada, sino porque el paisaje que se plantea en la película lo permite. Hay una serie de arquetipos muy reconocibles que es muy agradable ver en una película.

El final tiene mucho de “Los renegados del diablo”.
En realidad lo mío era más de “Duelo al sol”.

¿Porqué en [REC] y [REC]2 los infectados corren y aquí se arrastran como los de Romero?
¿Todas las personas son iguales? ¿No, verdad? Los zombis son personas, transformadas. ¿Entonces porqué no pueden ser distintos? ¿Porqué no pueden unos correr y otros andar? Y el que anda, quizás va lento porque se ha fracturado una rótula… La velocidad del zombi es variable en función de la necesidad dramática de la escena, es la primera ley de Newton.

¿Más allá de Jaume, qué has echado en falta a la hora de afrontar [REC]3 en solitario?
La verdad es que he echado de menos a Jaume en la promoción, porque en las dos películas anteriores fueron muchas risas. Haciendo la película, en realidad, nada. Quizás algo de la primera sobretodo, que era muy rock n’ roll, probablemente porque la hacíamos pensando que ni se iba a estrenar, que la colgaríamos en internet o la regalaríamos con el periódico. [REC] la rodábamos por la tarde-noche, y Jaume y yo quedábamos después de comer en un Starbucks y nos tomábamos un café mientras pensábamos que haríamos esa misma noche. Era muy punki. De hecho, el final de [REC] lo escribimos el día antes de rodarlo. Eso ya fue un caso extremo. Lo mismo pasó con la niña Medeiros, al principio iba a ser un hombre con bigote, el cura del que se habla, y al final, entre los cafés y las risas, decidimos ponerle tetas. Botet se quedó loco, pobre. En el final, Manuela no tenía ni idea de lo que iba a pasar. Nosotros más o menos sí, y nos metimos en el ático a oscuras con una handycam y empezamos a tirarles cosas, a gritarle a Botet. Esa energía sí que fue algo irrepetible. Y salió bien como podría haber salido mal. No es la manera de hacer las películas en realidad, y caes en un error si piensas que es así. En ese sentido, sí que he echado de menos ese tipo de experimentación, esa espontaneidad de construir la película con el espíritu de cuando hacíamos cortos. En [REC]3 estaba todo muy calculado, costaba un parto cada plano.

¿El cambio de formato, además de tener que ver con esa intención de renovar, también responde a tus ganas de rodar de nuevo de manera convencional?
Sí, claro. Me apetecía mucho volver a rodar cine en el que tener en cuenta la composición del cuadro y ese tipo de cosas. No se trata de cansancio de un formato, pero sí que es cierto que yo ya llevaba dos películas seguidas así y necesitaba contar de nuevo con la cámara, los movimientos y las ópticas.

¿Hasta qué punto te ha preocupado el exceso de información en la red previa al estreno?
Muchísimo. Las teorías me parecen bien, quiere decir que hay un interés. Lo que sí que me ha afectado son los spoilers y cosas que no son spoilers. Hoy en día es muy difícil llegar al cine sin anteponer la idea de lo que has visto en trailers, clips y otro tipo de material.

¿Qué poder tenías sobre esa material?
Aquí todo el material lo he hecho yo, lo único que yo no he controlado es el goteo, cómo se gestiona ese material. Lo que mola es jugar a la seducción y respetar al espectador que va al cine. Promocionando la película me preguntaban referentes y yo me acordaba de El fantasma del paraíso y Golpe en la pequeña China. Cuando fui a ver ésta última al cine, yo iba a ver una película de terror de John Carpenter, y te encontrabas con eso y te volvías loco. Pero eso, a día de hoy, es inviable.

Acaba de salir un comic de [REC], ¿qué podemos encontrar en él?
Cinco historias donde se explican muchas incógnitas que quedaron abiertas en las dos primeras películas. Los guiones son de Hermán Migoya, nos juntamos con él Jaume y yo y decidimos las sinopsis de las cinco historias, pero el guión lo hizo él. También elegimos los dibujantes, él nos hizo propuestas y nosotros escogimos. Estaba claro que Salvador Sanz y Álvaro Ruilova iban a estar, soy muy fan, sobretodo del último. Y la portada la hizo Alejandro Colucci, que es una pasada. Se explican muchas cosas – como el origen de la niña Medeiros – y lo que no se explica, se acabará de explicar en [REC]4, que cerrará el círculo.

Leticia Dolera

¿Te preparaste el papel de algún manera especial?
Sí, dos meses antes estuve yendo al gimnasio con un entrenador personal, de 4 a 5 días por semana. Hacía levantamiento de pesas, comía muchas proteínas. Por un lado, tenía que resultar creíble para el espectador que yo podía con la sierra y con los zombis, eso era muy importante para mí. Y por otra parte, tenía que ser realmente capaz de hacerlo. La sierra de verdad pesaba nueve quilos, pero es que la de mentira pesaba cinco… Yo quería estar a tope en cada toma, si Paco me pedía más, quería ser capaz de darlo todo en todas. Ese trabajo físico para cambiar mi complexión fue básico. Y además, me ayudó mucho a afrontar el papel. Me he dado cuenta de que cuando te sientes fuerte físicamente, la sensación es también emocional.

¿Tenías alguna doble en el set?
Esto es muy gracioso. Sí, la había, pero a mi me ponía muy nerviosa que hubiera una, no por ella, sino porque lo quería hacer todo yo. Me dio el rollo del personaje, de “yo voy a defender mi vida”, y yo voy a defender mi personaje. Hay una anécdota en una de las escenas que me tiro al suelo y me deslizo rodando bajo una puerta. Yo quería hacerlo pero el suelo tenía unas marcas y Paco no quería que me tirara por si me hacía un rasguño. Además, como ya habíamos grabado el final, podría crear un problema con el raccord. Total, que la doble se puso a hacerlo, y yo me moría de la envidia. Y a mí me tocaba correr hasta la puerta y asustarme. Me repetían que era peligroso, que la puerta pesaba mucho y podría hacerme daño. Pero al final me tiré. Paco se enfadó mucho conmigo. En la escena del túnel sí que le dije que lo quería hacer todo yo. De hecho, conseguí que pusieran a la doble de zombi al final.

No puedo imaginar ese rodaje con vestido de novia y tacones…
Voy a hacerte una confesión, no llevé los tacones durante toda la película. Aunque sí que es verdad que había tomas donde preguntaba si se me veían los pies para poder quitármelos, pero no me dejaban, porque no caminaba igual.

¿Cómo viviste la experiencia?
Como una fiesta, cada día llegaba feliz al rodaje. Era como una aventura, me preguntaba a qué zombis me tocaría matar. Ha sido un sueño estar en una película así. Es muy interesante el escoger una boda, un día en el que obligatoriamente todo el mundo tiene que ser feliz, una celebración del amor, y de repente meter ahí el horror.

Tu personaje de novia con motosierra está destinado a convertirse en un icono del género.
Antes de que existiera el guión, Paco ya me habló de la imagen de una novia con sierra mecánica, vestido rasgado y liga roja. Me flipaba la idea, y aún más sabiendo que lo iba a hacer yo. Es algo que a mí me gustaría ver en un cine. Es un regalo, como si te disfrazaras en Halloween e hicieras una película. Además, estéticamente el look es muy bonito: rimmel corrido, pelo mojado…Yo sentía que lo que hacía cada día era muy guay.

¿Paco te pidió que revisaras alguna película para inspirar tu personaje?
Sí, me dijo que quería que fuese como una Anna Karina en una película de terror. Me inspiré en la Uma Thurman de Kill Bill y en una película que se llama “La extraña que hay en ti”, donde sale Jodie Foster. Es una chica así pequeñita también, que se vuelve un poco psychokiller.

¿Cómo ha sido trabajar con Paco en un largometraje?
Lo guay con Paco es que entiendo lo que quiere con una sola frase, nos pillamos en seguida. Para “Maldito Viernes”, lo único que me dijo es: Eres un animal que acaba de salir de la placenta. Paco te dice cosas así, imágenes muy concretas.

¿Te dio margen para añadir cosas?
Lo mejor de trabajar con Paco es que da mucha libertad a los actores. Él es consciente de que cuando un actor está viviendo algo, puede aportar cosas que no estaban preparadas en un guión. El monólogo que tengo en la boda cuando me levanto en el convite, eso fue improvisado. Paco dejó que se me fuera mucho la olla, en el túnel sobretodo, ahí me volví loca cuando estoy encima del zombi con la motosierra. Pero eso solo lo puedes hacer cuando tienes un buen director y sabes que te va a cuidar. Creo que el arte interesante es el que trascurre en el riesgo. A veces sale bien y otras mal. A veces tienes que hacer tres tomas malas para que te salga una brillante. Yo no puedo arriesgar sino tengo esa confianza con el director, pero con Paco tengo la seguridad para explorar. Él domina muy bien la técnica, pero también es un gran director de actores, son dos cosas que no siempre se dan juntas. Es uno de los mejores directores con los que he trabajado jamás.

¿Hubo mucha improvisación en ese primer tramo de película?
Sí, piensa que la boda no la grabamos como una película al uso, había cinco cámaras: la de Atún, la del primo Adrián que era una handycam, y los iPhones. Paco no nos decía ¡acción! y entonces pasaba algo concreto, sino que dejaba que la boda tuviera lugar como una de verdad y las cámaras grababan, pero no sabías cuándo. Te obliga a estar concentrada y en situación todo el rato y llega un momento en el que dejas de pensar y solo te preocupas por vivir. No ves actores, ves a tu familia. Cuando Diego canta en al ceremonia, la figuración no lo sabía y todos se pusieron a cantar y aplaudir, es genial.

En el diario de rodaje hacías mucho hincapié en ese buen ambiente que se había creado en el set.
Sí, así fue. Y creo que eso se transmite en la película y de verdad parece un vídeo de una boda. Las bodas tienen algo muy cursi pero también muy mágico, da igual que no te lleves bien con tu prima, ¡es una boda! Pero sí, ese rollo que nos unió tanto se mantuvo durante todo el rodaje.

¿Crees que la película mantiene el espíritu de [REC]?
Sí, el espíritu de [REC] es darle al espectador aquello que no espera. El espectador de [REC] va al cine a que le sorprendan y que le den caña, no va a ver lo que ya se sabe, porque ya ha visto muchas películas de terror y de zombis. Y en este caso, los giros que va tomando la película no se le habrían ocurrido a nadie antes de entrar a la sala. Recuerdo cuando salió la noticia de que se iba a hacer [REC]3 Génesis, rulaban por internet sinopsis falsas sobre la Niña Medeiros en Portugal. La gracia era darle la vuelta a eso y ofrecer algo que nadie se esperaba para que la experiencia valiera la pena.

¿Que opinaste del final cuando lo viste en el guión por primera vez?
Pensé que era valiente y consecuente con la película.

Diego Martín

¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar en un proyecto de género?
Muy buena. Creo que al margen de género o no género, es que Paco es muy bueno. Paco Plaza es un tío muy bueno, el día que haga una película que no tenga nada que ver con el género, le va a salir igual de redonda. Yo he tenido uan sensación de. Por un lado, puede parecer un poco decepcionante porque piensas: Joder, voy a hacer un [REC], terror, algo que no he hecho nunca. Pero al final, no solo ha sido diferente, sino que he tenido la sensación que ha sido más una película de actores y personajes que de género. Al principio puedes creer que es un tipo de película en la que vas a estar un poco supeditado a la técnica, los maquillajes, la estética, y en la que el actor va a estar en segundo plano. Pero la realidad es que, al final, tenía la sensación que estábamos Paco, Leti y yo en una película de actores pequeñita con muchos matices y cosas muy sutiles. No tenía la sensación de ser solo una pieza más en un gran engranaje, Paco te hace sentir que tu eres parte de la construcción de la película y que la película es muy flexible y esta muy viva. Hay mucha improvisación, no hay un tótem sagrado que haya que mantener. Tengo la sensación de que hemos sido muy libres, y eso, haciendo una tercera parte de algo que, además, parece que lleva el peso de respetar a toda la gente que ha adorado a las dos anteriores, es un gustazo. Además, viendo la película, tienes la sensación de que todo está hecho de ese modo porqué es así como debe ser. Porque encaja y es orgánico, es el espíritu que tiene la película. No son conejos que se saca Paco de la chistera, la propia historia te va obligando, en el buen sentido, a que las cosas sean como son.

¿Hay alguna escena que te haya parecido más complicada?
Más que algo en concreto, a lo que más miedo tenía era al nivel de intensidad constante en el rodaje. En una película normal tienes muchos valles. Hay días marcados más intensos a nivel físico o emocional, y hay otros en los que vas más relajado. Aquí no, aquí estabas siempre a tope. No solo en la parte física de huir de los zombis, de sudar, correr, etc…, sino también en la celebración, en el banquete, con la alegría y el baile. Ha sido dura físicamente, con rodajes nocturnos y mucho frío, pero sobretodo mentalmente porque llegas a rodar a las nueve de la mañana con un día estupendo y ya empiezas a tope. Y todo el día es así. Llegan las cuatro de la tarde, te vas a comer, y estás a tope. Hay que gritar, correr y no te puedes permitir bajar de intensidad. Y eso es un poco lo que preocupa.

¿Habías visto [REC] y [REC]2?
Sí, pero, sin duda, ésta es la mejor de las tres. Puede tener que ver el hecho de que yo estén ella (risas). A mí, que no soy un gran entendido en género, me produce mucha satisfacción esta película. Porque manteniendo y respetando a la gente que controla mucho del tema, lo comparte también con otros espectadores. Es una película para todo el mundo, y cada uno puede encontrar cosas y momentos con los que subirse al tren. No tiene esa intención de ser solo para gente muy fiel y entendida, pero tampoco pierde el espíritu. La esencia detrás de todo eso es sorprender.

Àlex Monner

¿Habías visto las dos [REC] antes de entrar en el proyecto?
Sí, vi la primera. La segunda no, porque me creó un pequeño trauma. Estuve una semana sin poder dormir. Me hablaron peor de la segunda y preferí no pasar un mal rato de nuevo. Pero me reconcilié con ésta, porque cuando ves todo lo que hay detrás de cámaras, cómo maquillan a los infectados…, ves que todo es una mentira. Ahí reside la magia del cine.

¿Como te enfrentaste a una película de estas características?
Es un tipo de cine que nunca había hecho, con tantos efectos especiales y tanta sangre. Pero lo afronté de una manera muy natural.

El punto de vista de tu personaje es básico en la primera parte de la película.
Sí. Lo de grabar fue muy interesante, porque te metes directamente en la piel de un operador de cámara. Te tienes que coreografiar con figurantes, actores, especialistas, otros operadores y los perchas de sonido. Todas las carreras de los infectados de la primera parte están grabadas desde ahí, no hay casi ningún plano fijo, es una pasada vivirlo.

¿Te dio Paco libertad para grabar?
Sí, de hecho, era una de las cosas que más molaba. Podía ir tomando pequeños detalles que a mí me parecieran interesantes, y como Paco buscaba la máxima naturalidad de los personajes, yo grababa lo que realmente le interesaba al mío. Hay un zoom a unas tetas como guiño de un chaval de 17 años.

¿Hay material grabado en el autocar?
Sí, hay algo. Pero Paco decidió cortarlo.

¿Te quedaste con las ganas de salir como infectado?
De hecho, hice las pruebas de maquillaje para decidir si al final se hacía el papel o no. Se acabó haciendo, pero por cortes en el metraje al final no se incluyó.

Leticia habla siempre del buen rollo que había en el rodaje.
Sí, es verdad. Yo personalmente me he sentido muy cómodo en todas las escenas que rodamos y durante todos los días que estuvimos juntos en el set. Tanto con Paco, como con Diego, con quien comparto la mayoría de escenas. Había mucha compenetración, y eso es lo que hacía que Paco nos diera carta blanca para improvisar, porque ya existía una química previa. Se creaban situaciones externas al guión que eran muy chulas. De lo mejor que tiene la película. Además, la implicación de los figurantes fue impresionante. Ver a 150 personas haciendo perfectamente todo lo que se les pedía y cuando se les pedía, con lo difícil que es controlar eso, era admirable.

Te gustaría hacer otra película de género?
¿Porqué no?

Jaume Balagueró

¿Hasta qué punto te has implicado en [REC]3?
Una implicación de, básicamente, apoyo y amistad con Paco. Cuando tenía alguna duda, me lo comentaba, lo hablábamos y yo le aconsejaba. Pero es una película 100% Paco Plaza. Yo he estado allí simplemente para echarle una mano en lo que necesitara, aunque en esos momentos yo también estaba rodando “Mientras duermes”.

¿Qué te parece el giro que le ha dado Paco a la saga?
Creo que es muy sorprendente, es casi un cambio de género. Una película muy festiva, muy divertida, pero que evidentemente mantiene la esencia de [REC]. Es una película muy de Paco. Y me gusta que sea totalmente diferente, con otra historia. La idea de [REC] es que sea un juego que sorprenda, que nunca sea lo que tu esperas.

¿Te ha puesto el listón alto?
Claro, muy alto. Pero eso es un reto para intentar buscar la novedad en [REC]4.

¿Qué nos puedes contar de [REC]4 Apocalipsis?
Lo único seguro es que irá por otro camino y buscará sorprender de nuevo. Será la continuación directa de [REC]2 y pondrá el punto y final a la historia.


Vuestros comentarios

1. 08 abr 2012, 06:57 | Missterror

Felicidades por tan buen trabajo Samdra, hay mucho curro aquí, mucho.
Yo aún no he visto REC3 (esperaré a que se pase un poco el furor en las saals de cine españolas…), pero con las preguntas que has hecho y las respuestas que te han dado, ya me queda bastanta mas claro lo que voy a ver.

saludos

2. 08 abr 2012, 16:19 | Blanch

Buff cuantas cosas me quedarán por leer después de ver la peli. Pero yo creo que al final haré como Missy y esperaré a que pase la fiebre. Tengo demasiadas ganas de verla y esto no siempre es bueno.

3. 11 abr 2012, 19:39 | Blanch

Muy buena entrevista, que rabia no estar ahí para hacerla jajajaja. Oye Paco, para la próxima puedes contar conmigo como actor ¡quiero salir en alguna de REC! jajajaja. Sabes si habrá un director’s cut con las imágenes cortadas o algo?

Por cierto, creo que mis dudas han quedado resueltas inclinando la balanza a Paco Plaza. Lo siento Jaume.

4. 13 abr 2012, 22:46 | ameba-del-terror

Mmmmm… que decir… después de años sin ir al cine, me lo he pasado teta! La verdad es que me ha gustado un montón y eso que la primera me pareció un cagarro (con perdón de los amantes y los que la hicierón posible).

La segunda me gustó, también he de decirlo. Y esta última se lleva el premio.

Por cierto, también me ha gustado mucho la entrevista tiene un aire muy cálido, muy familiar.

En fin… ya veremos que sucede con la cuarta entrega…

5. 13 abr 2012, 22:49 | ameba-del-terror

AH! se me olvidaba, las fotos muy guapas, y la galería del Flickr también… es una pena que estemos en paro, si no te contrataríamos como fotografo Sr. fotógrafo :)

6. 15 abr 2012, 00:01 | Misael Aragón

osea que el guión de esta tercera parte se cuajo mientras veían el Mundial y solo fue hecho casi casi por cumplir con una franquicia….

porque realmente es muy mala, tediosa y bochornosa en muchas escenas.

ame las dos primeras y esta no tiene ni tantito embarrado ese feeling de angustia en incremento.

lo peor es que en esta parte recurren a cosas ya muy vistas …. como el tener que detener el virus…. con un método definitivo …..

total que está para llorar de lo patético.

7. 15 abr 2012, 00:42 | Misael Aragón

por cierto muy buenas las entrevistas y toodo chavales! :D

y vaya que los actores son de lo mejor, ellos cumplieron muy bien con su trabajo!

8. 15 abr 2012, 10:21 | Bob Rock

Ameba.- La primera un cagarro? Me has hecho llorar… yo que te creía una chica sensible con una gran capacidad para disfrutar de cagarros ;)

Ya sabes que para gustos los colores, yo quiero volver a sumergirme en el cine underground de verdad (ya véis que reseño ultimamente) porque lo estoy disfrutando como un enano. Pero de cine comercial, REC es lo más, casi mejor que Zoolander u cualquier película de Will Ferrell… ja ja ja, que obsesión tengo con el puñetero Ferrell… habéis visto el tráiler de Casa de mi Padre??? redios!! redios!! eso si que es un peliculón… ja ja ja, perdonad el arrebato…

Un abrazo!

9. 15 abr 2012, 14:53 | Samdra

La nueva comedia americana es lo más del mundo. Yo soy muy mucho de Judd Apatow (dirigiendo o produciendo) y toda su tropa. no vi el anuncio de La casa de mi padre, pero sí vi la entrevista en Jimmy Kimmel y me mató.

10. 16 abr 2012, 15:07 | ameba-del-terror

Weno, no sé, quizás tendría que volver a ver la primera parte, pero eso de pasarme cuasi dos horas escuchando a una mujer gritar histérica de la vida fué lo que me hizo considerarla una mierda, con perdón. Aunque dentro del panorama del cine español la verdad es que la pondría en un buen puesto…

Misael…Original en sí esta tercera parte no es que tenga mucho, la verdad, pero por lo menos no se hace pesada, continua con la saga y lo hace de una manera que seguro que mucha gente no se esparaba, incluida yo, que ya pensaba ir al cine solo por complacer al pobre Blanch que estaba como un niño con un caramelo haciendosele el culete pepsicola… así que pensaba ponerme de palomitas y cocacola y desconectar el cerebro, y al final sorpresa! me lo pasé requetebien… Pero bueno, si no te ha gustao que le vamos a hacer :P

11. 16 abr 2012, 15:40 | Bob Rock

El culo pesicola… que bueno, ¿pero para qué le das esos caprichos? luego se malacostumbra, je je je. Pues además me alegro de que os gustase que no está el cine para disgustos. Todavía no la he visto – no tengo perdón de Dios -… tengo que sacar tiempo!!

Un saludo

12. 16 abr 2012, 19:47 | Blanch

Oye Bob, pa’ un capricho que tengo jejejeje. ¿Acaso quieres probar de mi pesicola? jijiji

13. 18 abr 2012, 07:56 | Misael Aragón

Ameba: pues eso si, la verdad que me reí en muchas ocasiones… y vaya que esta hecha solo para pasar un buen rato!

y si no fuera esta la tercera parte de REC, la podría percibir tal vez, como algo rescatable en el género de comedia zombie jeje

Escribe tu comentario:

¡ATENCIÓN! El formulario de comentarios utiliza un sistema de previsualización con el objetivo luchar contra el spam. Por lo tanto, tras pulsar el botón PREVISUALIZAR no olvides pulsar el botón ENVIAR para dar de alta definitivamente el comentario.


Si desea incluir un spoiler indique use las etiquetas [spoiler] y [/spoiler] para enmarmar el texto que se ocultará.