Estás aquí: Página de inicio » Zombies » Dead Snow 2: Red vs Dead

Dead Snow 2: Red vs Dead

Los zombis nazis más gamberros que nunca

Dead Snow 2: Red vs Dead

Ver ficha completa

DIVERSIÓN:
TERROR:
ORIGINALIDAD:
GORE:
  • 3.5/5

No tenía ni puñetera idea de qué esperar de la secuela de Dead Snow (en España la conocimos como “Zombis Nazis”). De manera que finalmente decidí agarrame a todo un clásico que casi siempre acaba dando sus frutos cuando hablamos de secuelas: “más y mejor”. Y en cuanto al “más” lo cierto es que no albergo duda alguna. El noruego Tommy Wirkola, del que nunca me cansaré de recomendar su divertida versión de Hansel y Gretel, ha realizado un gran esfuerzo para ofrecernos en Dead Snow 2: Red vs Dead más… mucho más. Y más de todo. Más gore, más zombis, más uniformes (y no solamente nazis), más humor salvaje y políticamente incorrecto, más sexo ¿? (tendréis que ver la película hasta el final para dar respuesta a este par de interrogantes) y, supuestamente, más diversión. El problema es que no siempre la regla del “más y mejor” funciona en ambos sentidos. ¿Más significa siempre mejor? Ahí es donde, sí, empiezo a tener mis dudas.

Dead Snow 2: Red vs Dead arranca justo donde lo dejó su predecesora. Martin, nuestro sufrido protagonista, con un brazo menos, logra huir del escuadrón de zombis nazis que reclamaban su tesoro. Pero lejos de conformarse con el destello del oro que acaban de recuperar, estos entrañables nazis surgido de las montañas noruegas y liderados por Herzog, tienen planes mucho más ambiciosos que, de entrada, implican: un tanque, nuevos reclutas zombis y una población por arrasar. Pero Martin no piensa quedarse de brazo cruzado (¿y con qué coño lo cruza?). Con la ayuda de un supuesto escuadrón anti-zombie y de unos viejos “amigos” de los alemanes, Martin se embarcará en una descabellada y sangrienta batalla para evitar el levantamiento del Cuarto Reich.

No tengo ni idea de cómo le sentó a Wirkola la aventura de hacer las maletas, aterrizar en Hollywood, y rodar una película como Hansel & Gretel: cazadores de brujas que, a pesar de alguna que otra pincelada sangrienta y gamberra, estaba destinada a un público amplio y amante de las palomitas (y repito, por enésima vez, que soy el primer defensor de la película). No sé si Wirkola tuvo que reprimirse de algún modo. Si tuvo que contenerse. Que morderse la lengua, tragar bilis y acatar alguna que otra orden de un tipo vestido con traje caro y corbata. Pero lo cierto es que con Dead Snow 2: Red vs Dead da la impresión de que el bueno de Wirkola se estaba desquitando de algo. Como si se hubiera, por fin, liberado de un corsé que le había estado apretando durante demasiado tiempo. Con Dead Snow 2 vuelve a ser libre para hacer lo que le sale de los cojones (con perdón), y lo que se le sale de tan nobles partes no es otra cosa que un desquiciado espectáculo gore en el que prima, por encima de todo, el humor negro, salvaje y políticamente incorrecto del que hace gala la película durante todo su metraje. Wirkola no deja títere con cabeza. Le da igual si son niños, bebés, gays, embarazadas, curas o parapléjicos; en Dead Snow recibe todo Cristo. No se escapa nadie. De manera que la película acaba derivando en una sucesión de auténticas animaladas y desvaríos que difícilmente deajarán a nadie impasible. Si estáis listos y predispuestos para la fiesta, os lo pasaréis en grande con Dead Snow 2: Red vs Dead.

La película está repleta de momentos impagables; desde aquel en el que Martin descubre, horrorizado, que vuelve a contar con dos brazos (en un divertidísimo homenaje a la mano rebelde de Ash en Evil Dead 2), hasta llegar a una tronchante secuencia final al ritmo de los primeros compases de “Total eclipse of the heart”, de Bonnie Tyler. Y entre medias un grupo de freaks adictos a internet que se creen altamente cualificados para hacer frente al apocalipsis zombi, una cómica pareja de policías que, contra todo pronóstico, lograron hacerme reir y un desdichado zombi convertido en la fiel mascota del protagonista. La mezcla es tan extravagante y sinsentido, que no tienes más remedio que pasártelo en grande… o acabar aborreciendo la película. Reconozco que un servidor disfrutó de Dead Snow 2 al ritmo de los aplausos, vítores y exabruptos que este tipo de propuestas suele arrancar en un Festival como el de Sitges. Me divertí en la mayor parte de los, por otro lado, excesivos 100 mintuos que duró la película. Y a pesar de todo ello sigo teniendo mis dudas de que Wirkola haya logrado un “más y mejor”. Si en el primer Dead Snow quedaba algún atisbo de película de terror que no quedara sepultada bajo el gore y el humor bruto, en Dead Snow 2: Red vs Dead esa esencia terrorífica desaparece ya por completo. No hay nada más allá del humor pasado de rosca y del gore; y ello implica que en los momentos – pocos – en los que la película baja de ritmo, no tengamos nada a lo que agarrarnos. Probablemente a Dead Snow 2 le sobran unos 10 minutos de metraje (tirando muy bajo).

Por lo tanto, de todo lo dicho hasta el momento se desprende que sí, que me gustó Dead Snow 2: Red vs Dead. Que me reí. Que me lo pasé en grande. Que sus salvajadas políticamente incorrectas me parecieron tronchantes. Y evidentemente la recomiendo para disfrutarla en compañía de los colegas, por ejemplo, durante la inminente noche de Halloween. A partir de ahí… ¿Me gustó más que Dead Snow? No. Quizás porque, inevitablemente, en esta secuela se ha perdido el elemento sorpresa o quizás porque el Dead Snow original todavía conservaba, en su ensencia, una película de terror; pero sea como sea, “más” sí, “mejor” no. Y en cualquier caso, os recomiendo Dead Snow 2.

Lo mejor: Te ríes. Y te ríes a gusto, como por ejemplo en la última secuencia de la película.

Lo peor: Se ha perdido el factor sorpresa y el poquito componente de horror que tenía la primera entrega.


Vuestros comentarios

1. 25 oct 2014, 03:00 | Elizabeth

Hola Joan! tanto tiempo! te voy a decir que para mi fue una decepción. Tenía muchísimas ganas de verla y llegado el momento no pude disfrutarla. Si bien comienza bien y divertida, hacia la mitad de la película se me hizo insostenible, tampoco me gustaron los personajes, se me hicieron excesivamente ridículos. en fin…un 2/5 para mi.

Saludos Joan =)

2. 25 oct 2014, 09:22 | Joan Lafulla

Cuanto tiempo Elizabeth!!!!
Un placer tenerte de vuelta :-)
Nosotros seguimos por aquí… al pie del cañón.

Yo me lo pasé muy bien viendo este Dead Snow 2. Me reí mucho en determinados momentos de la película. Pero creo que esta secuela está un peldaño por debajo de la original. Aún así me gustó mucho.

No nos abandones durante tanto tiempo! :-)

3. 25 oct 2014, 11:22 | Mad Pelox

Muy buena reseña, aparte coincido en muchos puntos. La primera parte era desenfadada pero sí que tenía un componente de suspense e intriga, mientras que en esta segunda se apuesta descaradamente por el humor. De hecho yo definiría a Dead Snow 2 como una comedia negra, al estilo de Shaun of the Dead o Black Sheep sólo que mucho más gamberra y directa.

Diversión garantizada.

4. 25 oct 2014, 11:39 | fatone

Yo me reí muchísimo con esta secuela, tiene unos puntos de humor increíbles, si bien es cierto que la primera tiene toques mas “serios “.
En mi opinión excelente secuela

5. 25 oct 2014, 11:54 | Draghann

Yo también me reí bastante incluso en los casos en que las situaciones eran simples y trilladas. No sé, supongo que tenía buen día. La disfruté que es mucho más de lo que puedo decir de la mayor parte del cine que he visto este año.

Un saludo!

6. 25 oct 2014, 18:19 | Mountain

Yo tambien me divertí un montón viendo esta segunda parte. Sigo prefiriendo la primera pero esta es muy divertida y tiene momentos cojonudos, aunque poco aprovechados, como esa sala de cirujia de campaña que se monta el médico zombie en plena carniceria.

Por cierto, esta película se proyecta hoy en el primer dia del festival de cine de terror de Donosti del que aquí no se ha comentado nada de nada, una pena teniendo en cuenta que es el 25 aniversario del evento.

Joaaaaaaaaaaaan!!!!!!

7. 25 oct 2014, 20:54 | Joan Lafulla

@Mountain – arghhhhh!!!! Otra vez!!! Es como una pesadilla recurrente. Mañana, sin falta, un post sobre el Festival de San Sebastián… aunque sea con un día de retraso.

Un abrazo.

8. 27 oct 2014, 05:31 | Willy

De acuerdo con la critica, aunque yo le subiria un punto mas y es que la idea de Wirkola era diversion total sin frenos y, yo que buscaba eso, disfrute como loko la pelicula… vi cosas tan gore, tan bizarras, que me fascino y una mencion aparte al uso que hacen de los intestinos (Wirkola tiene una fascinacion con eso)… espero con ansias la proxima pelicula de este director… ;)

9. 06 ene 2015, 20:32 | Lettera 22

De las películas + divertidas del año pasado, sin duda. Aunque es más comedia gore que terror está muy bien hecha y t lo pasas en grande. Para disfrutar sól@ o acompañad@. Wirkola, un director a seguir muy de cerc@.

10. 13 mar 2015, 19:38 | RedRum

Es una pasada! fresca, divertida, cafre y genuina; siempre tuve la sensación de que la primera se quedaba a mitad de camino entre una especie de copy/paste a lo evil dead y algo original que no terminaba de explotarse; pero en esta ocasión solo puedo decir: viva la mente de Wirkola! esto sí es un batallón de zombiz nazis como Dios manda. Cada golpe, bien dado y milimetrado; era una secuela simplemente necesaria.

Ahora hasta veo la primera con mejores ojos.

Muy, muy buena. Un 8 y medio de 10.

Saludos!

11. 03 ago 2018, 03:52 | Cuervo

Entre tanta basurilla zombi surgida en los últimos años, está peli destaca con creces. Eso sí, que Jocelyn no de ni una carrerita en paños menores mientras jadea para escapar de los zombis es imperdonable para un morboso como yo.

Puntuación: ★★★ (sobre 5) por el culo te la inco (para estos 卐)

Saludos.

Escribe tu comentario:

¡ATENCIÓN! El formulario de comentarios utiliza un sistema de previsualización con el objetivo luchar contra el spam. Por lo tanto, tras pulsar el botón PREVISUALIZAR no olvides pulsar el botón ENVIAR para dar de alta definitivamente el comentario.


Si desea incluir un spoiler indique use las etiquetas [spoiler] y [/spoiler] para enmarmar el texto que se ocultará.