Time Lapse

Una vez más Almas Oscuras os trae una reseña antes que nadie, y es que nada nos gusta más que teneros al tanto de las ultimas novedades en el terror o, como en el título que nos ocupa, el thriller con tintes de ciencia ficción. ¿Qué nos ofrece pues Time Lapse? Se nos vende como una nueva tentativa de entretener con el tan versátil tema de las paradojas temporales, apoyado en una presentable factura técnica y unos actores que huyen de los clichés del género. Para mí ya bastaría con lo primero, pues mi fascinación no ha decrecido desde que vi The Terminator por primera vez. Me consta que hay mucho espectador con gustos afines, y es que el número de películas en torno a la materia es amplio; no falta ni el taquillazo que marca una generación, como Regreso al futuro ni la película de autor que marca otra, como Donnie Darko.

Con unos antecedentes así no dudé lo más mínimo en conseguir un pase de prensa para ver Time Lapse en versión original (no está ni doblada ni hay subtítulos todavía, pero confiemos en que ocurra para que nadie se quede con las ganas), y me puse a verla con una expectativas en alza.

No suelo desvelar mucho de la historia y aquí menos, pero diremos que todo se construye sobre la lógica avaricia y ansia de poder que corroería a cualquier hijo de vecino al saber que podría conocer el futuro, exactamente con veinticuatro horas de antelación. Lo que parece una convivencia tranquila entre amigos que comparten piso se irá pudriendo desde el interior, hasta llegar a un final revelador, “giro” incluído.

Lo cierto es que la primera impresión en el cuarto de hora inicial es prometedor.
Los créditos son simples pero resultones, con una melodía muy influenciada por Danny Elfman, compositor habitual de Tim Burton. Raya a un buen nivel estilísticamente, también, con ángulos de cámara inquietantes e imaginativos, aunque con una inocultable estética de directo a DVD.

Como ya se anunciaba más arriba, no sufrimos por suerte con los personajes estereotipados e inexistentes en la realidad que nos suele presentar el terror de Hollywood, en donde el elenco protagonista es un homogéneo grupo de veinteañeros modelos de revistas de fitness acabando todos sus tesis doctorales. Esta vez es trío protagonista tiene carencias, y muchas, sobre todo emocionales.

La simplicidad de escenarios es también elogiable, pues hace que la trama se tenga que sostener por sí misma, sin poder recurrir a metraje de relleno en forma de planos aereos o persecuciones, lo cual es un punto a favor. Perfectamente podría representarse como dramaturgia con los mínimos medios.

No todo es bueno, por desgracia. Superado el bien empaquetado planteamiento, la parte central de la película empieza a desinteresar al espectador, que echará en falta un ritmo más trepidante. He de confesar que Time Lapse es un thriller por los pelos, tanto es así, que etiquetarlo como drama sobrenatural no sería para nada desproporcionado. Aquellos que la vayan a ver tendrán que ir ya bien servidos de adrenalina, porque este título es muy apto para cardíacos, sobre todo aquellos que disfruten una historia de las de estrujarse las neuronas.

Por fortuna, el cierre es congruente y verosímil, casando así con el difícil planteamiento de guión de toda una pieza así; ni demasiado desafiante intelectualmente ni demasiado simplón, en su justa medida.

En definitiva, un filme que agrada por no pisar caminos ya trillados, por haber empleado sabiamente cada dólar de su magro presupuesto y por mostrar personajes humanos con actitudes y problemas humanos, pero que puede saber soso a seguidores del terror que se sacien sólamente con sustos o casquería.