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Errementari (El herrero y el diablo)

El diablo viste de paleto

Errementari (El herrero y el diablo)

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DIVERSIÓN:
TERROR:
ORIGINALIDAD:
GORE:
  • 3/5

El norte de España es rico en folclore y tradiciones. Sus bosques frondosos, sus aldeas aisladas y sus neblinosas llanuras, han albergado todo tipo de brujas, duendes, aparecidos y criaturas que, con los años, se han difuminado u olvidado bajo el avance imparable de la civilización y la industria. Unos pocos han sobrevivido como relatos tradicionales que divierten a adultos y asustan a los más pequeños. El cine ha traído a la pantalla estos mitos, en algunas ocasiones, y con desigual fortuna. Me gustaría destacar la sensacional y poco conocida en nuestras tierras (aunque multipremiada fuera de ellas) O Apóstolo, muy similar en intenciones y resultado a la que traemos hoy, que utilizó el stop motion para hilar diferentes leyendas gallegas. Ahora, bajo la producción de Alex de la iglesia, el director Paul Urkijo Alijo, se anima a recrear uno de los relatos más populares del imaginario vasco, tomando la suficiente distancia con el original para hacer de él algo nuevo, pero con todo el regusto del clásico.

La pequeña Usue entra en la tétrica herrería de las afueras de su aldea. Un lugar envuelto en misterio y habitado por un huraño personaje: Patxi. Al mismo tiempo, un representante del gobierno ha llegado al pueblo dispuesto a solucionar el misterio que envuelve al lugar y la desaparición de un cargamento de oro.

La primera vez que vi la cinta (en el festival de Sitges), pesó demasiado la decepción de no encontrarme con un cuento de terror gótico, que era lo que daba a entender su comunicación… En su lugar, encontré un relato de fantasía pura y dura que iba, poco a poco, dejando de lado sus tintes más oscuros para abrir la puerta al humor y al desenfado narrativo, aparcando el producto al filo del cine infantil- juvenil de los 80; el aroma de esos títulos míticos como Cristal Oscuro, Legend, Lady Halcón o La princesa prometida. Pero lo cierto es que, incluso en ese primer visionado, fui entrando gradualmente en el juego que ofrecía su director y la desilusión inicial se transformó en agrado.

Un segundo pase me ayudó a deleitarme en el cariño con el que se había abordado el proyecto; El herrero y el diablo cuenta con una factura delicada y una fotografía portentosa. La forma de rodar de su joven director está cargada de tintes de cine clásico que le van como anillo al dedo a todo el conjunto. Para terminar de redondear el producto, contamos con la presencia de dos magníficos actores: el veterano Kandido Uranga que encarna al herrero y el recientemente galardonado con un goya Eneko Sagardoy, en un personaje mitad Jack Sparrow de Piratas del Caribe mitad el asaltador de tumbas de Holly Motors. En los papeles secundarios la cosa flojea un poco más y en momentos puntuales uno tiene la sensación de estar ante una representación de teatro más que ante un formato de cine.

Así que aviso a posibles espectadores: abrid la mente y asimilad que no es una cinta de terror sino un cuento de fantasía. Y otro aviso: disfrutad del vasco en el que está rodado porque su acento y su mezcla de idiomas (como en “Handía”) logran hacer del conjunto algo único y sumamente immersivo.

Desgraciadamente no todo son buenas noticias y este Errementari pincha puntualmente en la calidad de algunos de sus efectos especiales y en la dirección de los extras en algunas de las secuencias: se nota que están puestos para rellenar el plano y se mueven de forma tan pautada que parecen los autómatas de Cortilandia. También en su potencia, la mezcla de sonido puede terminar siendo atronadora e incluso incómoda (especial mención a los crispantes chillidos de la niña protagonista cuando es secuestrada por el diablo). Fallos menores sin duda procedentes de un ajustadísimo presupuesto pero que molestan a una factura por lo demás notable.

Sin duda un excelente debut en el largo de su joven director y otro acierto más para las producciones de Alex de la Iglesia. Y cerraré estas líneas aplaudiendo a la joven Uma Bracaglia que interpreta a la pequeña Usue, pese a que se la note la inexperiencia en algunas secuencias, nos regala, en contrapartida, momentos sensacionales como cuando se pone a putear a diablillos con garbanzos.

Lo mejor: Su frescura y buena forma de jugar con lo clásico y lo moderno.

Lo peor: La dirección de la figuración de algunas escenas te saca de la cinta.


Vuestros comentarios

1. 22 abr 2018, 23:42 | Mountain

Qué pena, parece que solo el Tito Jesús y yo la hayamos visto cuando aquí hay un montón para disfrutar para los amantes del cine fantástico. Kandido Uranga está impresionante como el herrero, Eneko Sagardoi le saca chispas a ese sardónico demonio y la niña Uma Bracaglia nos regala una interpretación estupenda. Muy buena ambientación, desgraciadamente limitada por el presupuesto y una historia realmente curiosa y entretenida. Repito, una pena que no la haya visto más gente.

2. 22 jul 2018, 18:54 | lexter

Me gusto mucho, y , efectivamente no es una película de terror sino mas bien un relato fantástico, la encuentro algo parecida a “Las brujas de Zugarramurdi” o “El laberinto del fauno”. Yo la recomiendo ;)

3. 24 jul 2018, 00:17 | Arconte

Vista. Es una buena película, y como dice la reseña, un cuento folklórico bien llevado. Y si, los secundarios sacan bastante de la película. Pero bueno, no bastan para arruinar la experiencia. Yo la valoraria mas, teniendo en cuenta lo desértico de buenas propuestas de este último tiempo, sin que sea una obra maestra, claro…

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