Estás aquí: Página de inicio » Zombies » The Cured

The Cured

Limpad la mano que os da de comer

The Cured

Ver ficha completa

DIVERSIÓN:
TERROR:
ORIGINALIDAD:
GORE:
  • 2/5

EL virus laberinto ha azotado a la humanidad convirtiendo a muchos de sus miembros en bestias sin control sedientas de sangre, ¿o sabían perfectamente lo que hacían cuando devoraban a sus familiares y amigos? Por suerte, una cura es descubierta, un medicamento que regresa al 75% de los afectados a un estado de normalidad. ¿Pero cómo se pueden integrar estas “personas” a sabiendas de todos los horrores que han cometido?

En Dublín, el joven Senan es puesto en libertad tras ser curado. Bajo el fuerte control estatal y el desprecio social intenta iniciar una nueva vida, por suerte ha sido aceptado en casa de su cuñada, claro que ella no sabe quién fue el que realmente acabó con su marido. La nueva historia de Caín y Abel tomará un giro aun más siniestro cuando un viejo amigo de Senan quiera instaurar un nuevo orden donde los no infectados nunca sean reducidos a una minoría silenciosa encabezada por Fernando Arrabal.

¿No les pasa a ustedes que ciertas mañanas, tras observar las rutinas de sus conciudadanos, considera a la humanidad merecedora de un amanecer zombi y los consiguientes ríos de sangre? No se avergüencen de su odio, es otra forma como cualquier otra de sentirse vivo, si es que la justicia en decadencia les permite hacerlo, claro.

Por desgracia los apocalipsis solo se producen de manera personal, muriendo las ganas de luchar dentro de cada uno, convirtiéndonos en otro de esos caminantes de masa encefálica irrelevante, aletargados mientras aceptan el peso de la vida como una condena. A pesar de esta cortina de humo poética, la triste verdad es que ustedes y un servidor seguimos encadenados a una sociedad, la occidental o capitalista, llámela como menos le duela, donde las migajas de pan se obtienen en base a horas extras no remuneradas o los piropos que se vomitan sobre tal o cual muro. Prostituyendo así la creación artística hasta límites donde la sostenibilidad económica ya no parece ni siquiera una excusa para que una película, pintura, escultura o libro exista.

Creen editoriales independientes, o distribuidoras radicales, o exitosos canales de YouTube, o bandas musicales de alegres peinados… su destino es fabricar o endosar más basura revestida de falsa obra de arte. Han muerto los sueños y el infantilismo mal entendido campa a sus anchas entre la mediocridad diaria o, peor aún, a usted le violenta el deseo de reconocimiento por parte del resto de descerebrados con los que comparte oficina. Tanto su camiseta con mensaje como su colección de anécdotas sobre países extranjeros son producto del reciclaje, otro grano de arena perteneciente al lago desecado de la inspiración.

¿Muertos vivientes o infectados? La pregunta debería ser, ¿mediocre o lamentable?

Con tan optimistas reflexiones comienza mi última reseña dentro del subgénero zombi. Me niego a consumir, o al menos soltar las divagaciones habituales, sobre otra muestra de incompetencia supina, de falta de valor o respeto por la fiereza del subgénero. La eutrapelia ya pasa de castaño oscuro, y aunque esta vez “The Cured” puede presumir de una interesante idea, el resultado en pantalla dista de ser satisfactorio para cualquier amante del cine de terror. No sólo nos hallamos ante el descarado “homenaje” a la serie británica “In the Flesh”, además las lagunas argumentales adquieren un peso específico capaz de desviar a la tierra de su rumbo orbital.

Sería este el menor de los problemas –quien rinda culto a “El Regreso de los Muertos Vivientes” debería mostrarse prudente hablando de conceptos como credibilidad o realismo– si la película fuese divertida durante alguna de sus fases. Por desgracia, a excepción de cierto enigma durante su tramo inicial, el argumento deriva en esa sensación de vacío que tan comodamente justifica mi diatriba de más arriba, la constante del siglo XXI.

En un universo donde los muertos vivientes han llegado a colisionar con obras cumbres de la literatura como “Don Quijote de La Mancha”, parece algo snob solicitar originalidad a un guión que tiene como principales protagonistas a redivivos caníbales –soy consciente de que, en este caso, la condición de no fallecido de las víctimas de la epidemia es el primer cimiento argumental de la obra–. Sin embargo “The Cured” muestra esas gotitas originales, aunque robadas, situando la trama dentro de un marco distinto al habitual. De ahí su interesante arranque centrado en una Dublín donde la plaga ha sido controlada y el gran problema de sus hombres y mujeres lo representa integrarse con aquellos que han sido recuperados de las filas de los “infectados”. ¿Habrá horror?
Volvemos a explorar el drama social que algunos señalan como la verdadera raíz de “La Noche de los Muertos Vivientes”, esos mismos olvidan que delante de esa capa subyacente existe otra mucho más divertida y a la vez aterradora: la peligrosidad de un mordisco capaz de hacerte perder el control y atacar a tus seres queridos. Digamos que la clave del éxito del subgénero zombi radica en entenderlo como un mecanismo estético para saciar el gusto de emociones fuertes demostrado por el público, y a tal ejercicio me sumo con gusto. Estas lecturas más artificiosas han llegado a cansarme, quizás saturado por las diferentes combinatorias que las décadas han ido probando, todo hay que decirlo. Lo realmente irritante es la búsqueda de una intelectualidad que nunca ha funcionado más allá del juego inocente de, por ejemplo, “Mortal Zombi”.

“The Cured” intenta darle la vuelta a la tortilla y analizar ese sentimiento de temor pasado ya el mal trago, sólo que se pierde en tonterías y escenas sin sentido donde diálogos y flashbacks repetitivos se adueñan del metraje. Ni siquiera una tramo final con algo más de acción, hay que señalar la pobreza de la misma, consigue redimir la insípida puesta en escena tan encantada de sí misma, embutida en su talar de drama urbano.

Que cuatro sujetos fuertemente controlados por fuerzas armadas monten una revolución delante de las narices de esas fuerzas, o que una científica no sepa sacar conclusiones de unos monitores de televisión, o que un militar bien entrenado vaya solo a una detención, o que uno de los personajes más importantes de la trama desaparezca así sin más, o que cinco mil infectado terminen pareciendo veinte… todos estos agujeros son la demostración de las prisas y poco mimo que los actuales cineastas ponen en sus guiones, cuando no son los medios económicos los responsables de la zancadilla.

Peor todavía cuando se trata de un debut y las prisas deberían estar supeditadas a la obligación de ofrecer un producto sólido narrativamente. David Freyne no hace más que ir y volver con un flashback que se hace eterno, al ser ofrecido en piezas, y que no aporta nada, absolutamente nada, al grueso de la historia una vez sabemos que os lo que ha pasado. Por otra parte hablamos de un quid desvelado en la sinopsis desde que fuese liberado el tráiler de rigor, ¿qué sentido tiene basar tanta parafernalia en la integración social? El SIDA, hasta la inmigración, hubiese podido ser motivo suficiente para construir la historia; el apocalipsis zombi vuelve a estar de más cuando se hace tanto hincapié en usarlo a medias.

Desgraciadamente faltan otros elementos de valor con los que juzgar menos severamente a “The Cured”, duramente tratada en esta reseña por lo gris que me ha resultado su contenido, en ningún caso por ser insultante. Al revés, anodina e inocua son adjetivos que le quedan como un guante.

En el aspecto interpretativo encontramos mejores argumentos para volver contentos a casa, especialmente en el caso de Ellen Page, que demuestra su experiencia dándole algo de relleno a las escenas donde participa. Con todo, el momento más divertido del metraje ha sido verla huir de una institución que se supone fuertemente protegida por las fuerzas armadas del país, ¿en serio? Sus compañeros de crimen son dos figuras alineadas física y facialmente para jugar al bueno y el malo. Tanto maniqueísmo ya de partida resulta un claro límite para el desarrollo de ideas más complejas y retorcidas, de las que “The Cured” anda muy necesitada.

En definitiva, intrascendencia en estado puro que se salva de palabras peores gracias a plantear un escenario poseedor de un mínimo de interés. Claro que, como ya he señalado, no es mérito de su director y guionista, muy verde para este tipo de proyectos donde la ambición se pierde en el intento de ocultar el terror tras capas y más capas de maquillaje de drama. Hace falta algo talento si quieres seguir los pasos de moda sin que se te note el plumero, David Freyne es tan obvio que da un poquito de lástima.

Lo mejor: La idea de base.

Lo peor: Abuso de los flashbacks y un tramo final aburrido a pesar de tener más acción.


Vuestros comentarios

1. 02 jun 2018, 09:22 | Draghann

¿Otro dramón? Pues va a ser que esta vez paso…

2. 04 jun 2018, 18:09 | Nacho

Pues esta me pareció incluso más floja que Cargo. Es correcta en todos los aspectos, pero le falta ese plus que la haga destacar en algo y que te deje un buen sabor de boca de haber visto una buena peli de infectados.

3. 11 jun 2018, 00:50 | paulcrosnier

A mi me gusto, toca la temática zombie con inteligencia.

4. 19 sep 2018, 12:08 | Raul

A mí me quedó claro con la sinopsis que era un drama de terror que toca problemáticas sociales y políticas, hay zombis pero no en la vertiente clásica sino desde otro prisma. Por lo que sabía a lo que iba y me pareció una buena peli, sin ser ninguna obra maestra pero le pondría un 3/5.

5. 22 feb 2019, 00:34 | Supercollider

También me gustó, me parece una peli correcta del género post zombie. Complementaria de la serie In the flesh, que sigo sin entender porque la cancelaron.
Me gustó cuando los exzombies se juntaban y compartían el vínculo salvaje de la caza.

Escribe tu comentario:

¡ATENCIÓN! El formulario de comentarios utiliza un sistema de previsualización con el objetivo luchar contra el spam. Por lo tanto, tras pulsar el botón PREVISUALIZAR no olvides pulsar el botón ENVIAR para dar de alta definitivamente el comentario.


Si desea incluir un spoiler indique use las etiquetas [spoiler] y [/spoiler] para enmarmar el texto que se ocultará.