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The prodigy

Smack my kid up

The prodigy

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DIVERSIÓN:
TERROR:
ORIGINALIDAD:
GORE:
  • 3/5





Hemos perdido ya la cuenta del numero de películas con niño malvado que hemos visto a lo largo de nuestra vida. Se trata de un subgénero realmente agotado y que a día de hoy funciona mejor como elemento dentro de otros terrores que como base sobre la que mantener tu película. El error viene, además, cuando nos creemos que la cara de cabrón del niño de turno puede mantenernos aterrorizados durante hora y media y encima ser mínimamente verosímil. Si decides jugarte toda tu película a una sola carta debes estar muy seguro de que esta justificará dicho protagonismo.

En el caso de The Prodigy, el niño de marras (Jackson Robert Scott) cumple con el papel sin problema alguno. Su uso de la expresión facial intermitente entre lo diabólico y lo tierno lleva el peso de la credibilidad a lo largo de la narración.
Y aquí, en el uso de su piedra angular, es donde la película mueve pieza de manera interesante. Pues daba esta sobreexplotación infantil y lo difícil que es dar con una idea nueva y original que justifique el contexto, McCarthy (como ya hizo antes en El Pacto y Home) decide moldear el “cómo” antes que el “qué”. Dichas anteriores propuestas hacían un uso muy visual de la narrativa. El Pacto, por ejemplo, era una historia de fantasmas bastante conocida, pero contada desde la aspereza y frialdad más propia del Thriller, e incluso tomaba la decisión de añadir elementos de dicho género en su historia.

Es tal el acercamiento entre géneros que terminamos encontrándonos que The Prodigy no es una película de terror. Es un thriller sobrenatural, que dado el componente espiritual de lo que cuenta utilizará algunas herramientas propias del terror comercial a lo largo de su transcurso.
Y es precisamente ahí donde la película flojea. Su principal baza es un arma de doble filo. Huir del terror es su principal acierto y lo que la hace algo original original. Sin embargo, cuando hace uso del género, y al hacerlo de un modo algo chabacano a base de jump scares en ocasiones un poco traidores, es donde uno vuelve a la realidad y se despega por unos segundos de esa tensión que la película es capaz de crear tan bien a medida que avanza. Sin embargo, debo reconocer que uno de estos golpes de efecto, que de por si y en pausa puede resultar ridículo, me pilló totalmente desprevenido y me hizo pegar un buen bote. Es decir: funcionar funcionan. Pero rompen con el tono mas serio y menos festivo que predomina a lo largo de la narración.

Esta contraposición puede pasarle factura a mas de uno. *Puede descolocar a los que busquen una cinta de terror al us*o. Sin embargo, bajo esa primera capa, que se concentra mayormente en la primera mitad de la película, se encuentra el juego más turbio aún. Un juego que funciona como un crescendo tenso y macabro que se mantiene desde este momento hasta su, especialmente interesante, tramo final. Consiguiendo así un clímax equilibrado y muy acorde a toda la narrativa previa sin perder ni pizca de maldad por el camino.

La película juega con temas algo peliagudos en ciertos momentos. Eso sí, sin mojarse en exceso. No esperéis algo parecido a la inglesa The Children (2008) por que estamos ante un trabajo que, dada su condición de producto se mueve en terrenos mucho más seguros.

Es una lástima, pues se trata de una historia, y una manera de abordarla, que le hubiese venido como anillo al dedo al McCarthy de El Pacto, en que las formas no eran un problema a la hora de buscar un público mas reducido. Los convencionalismos bajo los que se mueve The Prodigy hacen que uno note como la película arrastra continuamente una sensación de quedarse a medio gas. También es cierto que el guion de Buhler no profundiza tanto como la historia debería en según que asuntos. Sin embargo, esto también hace que, a la hora de asustar, la película mantenga los pies en la tierra y sume verosimilitud a un conjunto, recordemos, movido bajo una capa de cierto realismo. Además, el libreto puede permitirse pegar un par de volantazos interesantes al no decidir dejar todo el peso de la trama a las ordenes de un misterio al que el espectador se hubiese adelantado.

La dupla McCarthy – Nielson (director y director de fotografía), que llevan juntos desde el cortometraje que originó El Pacto es crucial para que este tono terrenal pueda establecerse desde lo visual, pues la paleta de colores apagada y urbana, muy al estilo de sus anteriores trabajos, se encarga de narrar la historia no solo desde una aparente realidad si no que ayuda a establecer también el drama de lectura pesimista en el que se basa la trama.

The Prodigy no pasará la historia como una cinta especialmente memorable por su contenido. Sin embargo, si que hará disfrutar a aquellos que busquen algo de trabajo de construcción tras un proyecto de aparente fabricación en cadena.

Lo mejor: Mantenerse en lo terrenal le sienta muy bien.

Lo peor: Mal que me pese, los momentos de terror. ¡Ah, y que en toda la peli no suene Invaders must die!


Vuestros comentarios

1. 06 feb 2019, 11:42 | tito Jesús

estas de niños demoníacos me gustan mucho, iré a ver qué tal…

2. 15 feb 2019, 20:39 | Dani

Yo no sé si ya estoy inmunizado respecto a este tipo de películas, pero miedo, lo que es miedo, no da nada. Cero patatero. Si acaso, y muy si acaso, destacar un único amago de sorpresa, pero que los que ya hemos visto muchas de éstas, se ve venir en cuanto el crío empieza a correr ;)
Por enésima vez, una película de terror no es ni más ni menos que las imágenes del tráiler, y eso lo digo habiendo visto este último después de ir al cine. Más allá de ellas sólo hay decepción.
Podían haber desarrollado muchísimo más la trama si eliminarán lo que no sirve para absolutamente nada en el devenir de la historia. En lugar de ello, acaba por no responder a preguntas fundamentales (ay Dios mío!!!, el final me mata…) y se centra en otras cuestiones que resultan intrascendentes. Por ejemplo, lo de la inteligencia del chaval es superfluo. Podían haberlo hecho borrico, de los de no saber hacer la O con un canuto, y hubiera surtido el mismo efecto. Y lo curioso es que para ser tan listo, hace cosas un poco ilógicas.
No quiero estroperarle a nadie la película, pero los 15 últimos minutos conforman uno de los finales final más absurdos que he visto en mucho tiempo, además de predecible. Es una muestra más de lo mal que aprovecha las situaciones y los personajes.
Siendo generosos, un 1’5 sobre 5, y creo que me pasó de bueno :D

3. 03 may 2019, 10:41 | AZOTE

Originalidad por los cuatro costados hamijos, trama de asesino del más allá en peli de niño cabrón. No hacer de ello un secreto es más decencia del guionista que un acierto.

Del montón.

4. 04 may 2019, 12:32 | rainbow butterfly unicorn kitty

unikitty esta perpleja.

cuando vi el comienzo de esta pelicula me extrañé. muestran como acaban con un asesino, haciendo un paralelo con el nacimiento del chico protagonista ¿tendrá algo que ver con lo que pasa despues? espero que no…

cuando el chico dice “el esta aqui” señalandose un costado de la cabeza luego de una pesadilla me asusté. por favor que no sea lo que estoy pensando…

pero cuando el psicologo (o lo que sea) dice, muy suelto de cuerpo, palabras como “reencarnacion” y “el alma de su hijo sera absorbida por otra y pronto su hijo dejara de existir” ahi me enojé. a continuacion ya me imaginaba que podria suceder cualquier cosa.
y como muestra, ahi está, la sesion de hipnosis y el momento del niño corriendo que menciona dani (comentario 2). que manera de cagar una buena pelicula con una buena ambientacion tenebrosa con semejante guion de mierda, por favor…
a partir de alli cada vez que veia al chico ¿poseido? no podia dejar de reirme socarronamente.
y despues, está lo que sucede en el final.
alli pasan cosas tan absurdas que no pude dejar de ver toda esa secuencia con cara de “¿me estas jodiendo?” y mas adelante, cerca del final, preguntarme “¡¿va a terminar asi?!”

rainbow butterfly unicorn kitty recomienda esta pelicula solo si quieren ver algo muy absurdo y sin sentido.

5. 08 div 2019, 03:06 | ⛧Chupasangre⛧

No la quiero penalizar por su falta de originalidad porque balas de un mismo calibre causan siempre orificios únicos y es la fuerza y el alma lo que hace que un producto brille, más la originalidad exenta de estos dos factores es un suicidio.

Así que no la penalizo por ello y me quedo con los momentos de tensión y el desarrollo, el brutal chantaje y el final a lo “Jen…” (decirlo seriá spoiler)

Saludos.

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