Minireseñas: Mis novedades vistas del 1-16 de Noviembre de 2021

EL JUEGO DEL CALAMAR: TEMPORADA 1 (4/5)

Curioso ver como el éxito inesperado y transformación en fenómeno social de algo, le confiere al mismo producto cierto rechazo por parte de los mismos, o muchos de ellos, que la pondrían como obra de culto de pasar desapercibido. 

De antemano, decir que esta primera temporada de El juego del calamar me ha parecido notable, por momentos sobresaliente. Thriller y ácido drama surcoreano de calidad, como nos tienen acostumbrados en los últimos años, con ese añadido de survival que ha vuelto loco a medio mundo. Las pruebas, el reto a lo Battle Royale, es tenso y muy entretenido. Violento y con mala leche. Pero hay elementos de interés más allá del morbo de esos juegos. La lectura de la sociedad, no sólo surcoreana, del individuo, que viene a ser lo mismo que hizo la premiada Parásitos.

Puede que en algunos episodios se perciba relleno, para alargar hasta los 9 episodios, pero todo se entiende al final. Es necesario un buen desarrollo de personajes para entender sus decisiones, sentir empatía (o todo lo contrario) por ellos, más allá del trazo grueso de alguno. Un exito rotundo, hubiera tenido esa acogida o no. Sin embargo, me quedo pensando en que, quizás, formato miniserie y terminar ahí hubiera sido muy acertado. Veremos si mantienen el nivel en la forma en la que pretenden continuar.

INVENCIBLE (TEMPORADA 1) (3,7/5)

Robert Kirkman es mucho más que The Walking Dead. De hecho, ya tardaban en adaptar una de sus mejores obras: Invencible. Su particular, y visceral, punto de vista de la temática de superhéroes. Y oye, ha salido bastante bien. Amazon y en la producción Seth Rogen, Evan Goldberg o el propio Kirkman, se atreven, en su línea de series sobre superhéroes distintos, junto a The Boys, con una arriesgada, conflictiva, traslación audiovisual de un material en viñetas con mucha chicha, a todos los niveles. Apuesta por el desconcierto en el sensacional primer episodio (para los que desconocen el material original). Lo que parece otra serie sobre gente con poderes, se convierte en un sangriento body-horror en los últimos minutos. Y presenta el intrigante giro para lo siguiente. En líneas generales es fiel al cómic. Hay cambios en ciertos personajes, alguna licencia LGTBI de estas tan de moda o un desenlace diferente en según que acontecimientos. Poco más. Creo que, dentro de lo posible, han acertado con el espíritu y mala leche. Veremos próximamente.

Otra muestra de que el cine de superhéroes, salvo excepciones, vive su edad de oro a nivel televisivo, y no en la gran pantalla. Porque sí, las series actualmente son cine, en porciones, con mayor libertad creativa y tiempo para desarrollar sus tramas/adaptaciones.

LOVE, DEATH AND ROBOTS: TEMPORADA 2 

Vuelven el amor, la muerte y los robots de la mano de David Fincher y Tim Miller como creadores, y en el caso de Miller director de uno de los segmentos. Un regreso correcto, con grandes animaciones, aunque historias menos interesantes, con alguna excepción.

De peor a mejor:

SERVICIO AL CLIENTE AUTOMATIZADO. Una anciana tiene que salvarse ella, y así perro, de un robot aspirador que se vuelve agresivo. Humor tontorrón y todo un poco visto. (2,5/5)

COBIJO. Parecido al anterior, pero de tono serio y sombrío. Animación tremendamente realista con Michael B. Jordan de estrella invitada luchando contra robot de mantenimiento demente. Entretanto, insertos de batalla aérea. Todo muy espectacular, pero sin alma. (2,5/5)

HIELO. Correcto. Animación deliciosa e historia justita, con humanos mejorados y unas espectaculares ballenas ciberneticas. El tema es que, teniendo todo para ser de los mejores, el poso que deja es de pasable, sin más. (3/5)

RESPUESTA EVOLUTIVA. Bueno. Con destellos de Blade Runner, un segmento con profundidad en pocos minutos y potencial de desarrollo. Un mundo futuro en el que se obtiene inmortalidad a cambio de no tener hijos y perseguidos que siguen teniéndolos. Para reflexionar. (3,2/5)

NIEVE EN EL DESIERTO. Bueno. Otro cyberpunk con potencial de desarrolló y animación de un realismo que confunde. Un humano extraordinario con el poder de reemplazar sus propios órganos está en busca y captura. Interesante y con alguna escena de acción cojonuda. (3,2/5)

LA HIERBA ALTA. Bueno. Entre King y Lovecraft, un relato sugestivo por su atmósfera y escenario. Se siente esa soledad e inquietud al verse perdido entre matorrales. Una pesadilla que, sin contar nada nuevo, seduce por sus formas y referencias. (3,5/5)

EL GIGANTE AHOGADO. Muy bueno. Una obra de arte. Un gigante, un titán, aparece muerto en la playa, como si se tratara de una ballena. El paso del tiempo va quitando, y poniendo, todo en su lugar. Sería el mejor de la temporada de no ser por... (3,7/5)

POR TODA LA CASA. Muy bueno. El segmento más corto y también el mejor. Un reverso oscuro, escalofriante y divertido a la típica historia de Navidad. De hecho, hay que pedir un largo de esto YA. Dos hermanitos despiertan ansiosos por encontrar a Santa Claus con los regalos. (3,7/5)

TIEMPO (3,2/5)

Siendo consciente de que es muy difícil volver a ver al Shyamalan de su tetralogía maestra (El sexto sentido, El protegido, Señales y El bosque), Tiempo es lo más cercano que ha hecho en los últimos 17 años, con permiso de sus episodios en la genial serie Servant. Por partes:

Imperfecta, con sus más y sus menos, dependiendo de cada espectador, pues siempre transcurre en una delgada línea que separa lo genial de lo ridículo. Y precisamente por ello, aplaudo la valentía de hacer algo así en el apalancado mainstream moderno.

Adaptación de la novela gráfica Sand Castle, que me pongo en pendientes ya mismo, no tengo claro si habrá sido fiel o no, pero el riesgo está ahí, y se lo ha tomado. Por suerte, al volver a rodar con presupuestos ajustados desde su resurrección con La visita, se lo permiten.

El tiempo lo destruye todo, ya lo decían en Irreversible. Como disección del paso del mismo, tiene momentos demoledores. El giro, que sí, hay Shyamalan-twist, me funciona, aunque me resulta más interesante el frenético devenir de los personajes hasta entonces.

NO RESPIRES: PARTE 2 (3,2/5)

No respires 2 es la redención del hombre ciego como si la hubiera producido la Cannon Films. Una muy entretenida y efectiva secuela que se distancia en tono de su antecesora: del terror paramos a la acción, sin tanto silencio ni tensión. A cambio, el show de Stephen Lang. El misterio, más que el de la trama, es saber qué pócima toma Lang para mantenerse así con 70 tacos. Aparte, su hombre ciego cobra nueva entidad, en un cambio valiente que puede chocar a muchos espectadores. Un personaje que va ganando matices. Hora y media con buen ritmo, algunas muertes bastante burras, inesperados momentos emotivos y ese aire a cine de antihéroes justicieros de los 80s... ¿Esperabais otra cosa? Eso ya es otro asunto. Pero oye, con lo que hay, me lo he pasado mejor que con la entrega previa.

HISTORIAS PARA NO DORMIR (TEMPORADA 1)

Historias para no dormir ha vuelto en forma de actualización de episodios míticos de la enorme serie original de Chicho Ibáñez Serrador. Y llega después del fallido experimento Películas para no dormir, que contó con el propio Chicho antes de dejarnos. Os hablo de cada episodio:

EL DOBLE. La de Rodrigo Sorogoyen. Rollo Black Mirror, sin tanto tino aunque con sus puntos de interés. Adaptado a un futuro cercano, con la habitual fuerza en la puesta en escena de su director, la historia va de más a menos y deja un desenlace confuso. (3,2/5)

FREDDY. La de Paco Plaza. El mejor episodio, con el habitual tono nostálgico de Plaza y su conocimiento del género. Genial muñeco, banda sonora y alguna muerte contundente. Plaza también dirigió la mejor del anterior experimento: Cuento de Navidad. En esa línea. (3,5/5)

EL ASFALTO. La de Paula Ortiz. Mejor de lo esperado, que era muy poco, prejuzgando la elección de Rovira para tan gran personaje e historia. Cumple en todos los apartados. Sin más. Coherente en su adaptación y Rovira, aunque le queda grande, no está terrible. (3/5)

LA BROMA. La de Rodrigo Cortés. Aunque empieza fuerte, la broma se va diluyendo y queda como el episodio más random. Poca broma. Se sostiene por sus buenos actores y puesta en escena, por encima de lo previsible del desarrollo y desenlace. (2,7/5)

THE MEDIUM (1,5/5)

Uno de mis mayores chascos que me llevo este 2021, en materia cinematográfica, es The Medium. Y no porque no llegara avisado de la necesidad de bajar expectativas, tras su paso por Sitges. No, es que ni con las expectativas bajas. Es terrible. Un tándem formado por el director Banjong Pisanthanakun, de Shutter, y el guionista Na Hong-Jin, de The Chaser o The Wailing, apuntaba a mucho más que esta mezcla larga, muy larga (130 minutos, de los que sobran 50) de documental sobre chamanismo y refrito sobrenatural.

Dividida en dos partes, bien diferenciadas, no termina de interesar en la primera, tediosa hasta el hartazgo, y la segunda, la de terror, no es más que un largo mix sin gracia de imágenes y sustos muy vistos en el falso documental moderno. Aparte, el formato pierde el sentido. Vendida como la película por la que muchos espectadores en Tailandia pedían encender las luces en las salas de cine. Algo así. Oye, en parte puede ser cierto, puesto que allí tienen un concepto de espiritualidad y miedo a la misma mucho más intenso que el nuestro. Allí.

HOSTS (1/5)

Bonita basura que me acabo de tragar. A veces ocurre, aunque ante la falta de tiempo suelo seleccionar bastante lo que veo últimamente, hay que arriesgar. Y salió cruz. Y eso que hay un par de escenas gore cojonudas y con mucha mala hostia, pero el resto es un sopor. Un home invasion pasado por un ridículo filtro fantástico a base de lentillas brillantes e infulas dramáticas machacadas por interpretaciones terribles, que uno no está seguro si, incluso, pueden ser pretendidas, o efecto de algún psicotrópico.