Zombie (1995)
El más horripilante psicópata sexual jamás creado en la ficción
Autor: Joyce Carol Oates.
Argumento: Quentin P., trientañero solitario, trabaja de cuidador en una finca habilitada como residencia de estudiantes cerca de la universidad. Quentin P. sueña con crear un zombie que satisfaga todos sus deseos sexuales y órdenes inmediatas, un compañero zombie que no le cuestione ni le juzque, un siervo que le llame “amo” y le necesite para vivir. Así, durante más de 5 años de estudio sobre la lobotomía, decide comenzar sus experimentos.
Sus víctimas serán vagabundos y yonquies: Guantesdeconejo (el primero) morirá en 12 minutos. Ojosdepasa aguantará 7 horas, y Grandullón un poco más; pero todos los experimentos son fallidos y Quentin P. no consigue el punto exacto entre el picahielos y el cerebro. Pasan los días y Quentin P. se vuelve impaciente. Sin Nombre y Lengua de Terciopelo también acaban muertos y no se convierten en Zombies, así que la búsqueda se hace implacable.
Quentin P. (que cuenta con una condena a su espalda por un crimen racial, por abuso sexual y asesinato a un niño negro de 12 años), se enamora platónicamente de un joven universitaro, Ardilla , al que realizará un seguimiento exhaustivo y posterior secuestro para finalmente...volver a fallar.
La policía, después de la desaparción del campus de Ardilla, vigilará a Quentin (clasificado como delincuente sexual) de cerca y todo corre peligro...
Comentario: soberbio libro de obligada lectura para todo amante del terror. Su autora, Joyce Carol Oates, candidata en multitud de ocasiones al Nobel de literatura, nos adentra en un relato escrito en primera persona, a modo de diario, en la mente del que ha descrito la crítica como “el más creible y horripilante psicópata sexual jamás creado en la ficción”.
Oates, que se basa en la vida de Jeffrey Dahmer, nos hace empatizar de un modo sutil con las víctima (a las que impersonaliza para cosificarlas) y a la vez entender a ese gran psicópata, Quentin P.; y en este punto ya no eres capaz de culpablizar a Quentin (ya que nos muestra actos razonables), aunque asistamos a terribles lobotomías y otros actos de crueldad para convertir a sus víctimas en zombies, por lo que el terror psicológico al leer este libro ofrece su punto álgido.
Que una escritora, ganadora del Pulitzer en 2000 y premio nacional de Literatura de EE.UU en 1970, nos deleite con esta oscura narración no deja de ser interesante. Una visión del terror en su cara más cruda y real para una proilífica escritora, que ha tocado todos los palos literarios (novela, ensayo, teatro, poesía e incluso guiones cinematográficos) es un acto de valentía y riesgo propio de alguien muy seguro de sí mismo.
Impagable la escena del padre de Quentin cerca del armario dónde éste guarda restos de Grandullón y el descubrimiento de su alter ego, Todd Cutter, a la hora de aprisionar a Ardilla.
La conclusión cae por su propio peso, hay que leer "Zombie" para descubrir la gran literatura, destinada a ser estudiada en Institutos y Universidades, y dejar de ver el género del terror como literatura menor.