Esperando al tren
En estas fechas festivas y con el clima descontrolado al que estamos sometidos, me vienen a la cabeza imágenes estáticas, que tengo grabadas en la mente, de mis viajes en tren. Por así decirlo, postales navideñas melancólicas. En concreto, de las estaciones abandonadas que han ido quedando a la vera de raíles oxidados. ¿Qué mejor ubicación para una breve historia de fantasmas?
Espero que os inquiete ó, en todo caso, haga que miréis más atentamente por las ventanillas cuando viajéis en tren…