Maldito Amor
Slasher, giallo, comedia... ¿chileno?
Un grupo de adolescentes ve arruinada su noche de graduación cuando se descubre el asesinato de su maestro Marion a dos días del gran evento. Por los pasillos del instituto se rumorea que el asesino es un maniaco sin rostro, pero todos sabemos que los chicos jóvenes son especialmente sensibles a las habladurías, ¿verdad? Arturo, ajeno a los chismes, está destrozado pero no por la muerte de su profesor: estaba esperando el baile de graduación como excusa para declararse a la chica de sus sueños, María Elena, que acaba de comenzar una penetina relación con un mago misterioso. Aunque no todo está perdido, Arturo comienza una amistad con Beatriz, la chica más popular de la escuela, con el objetivo de poner celosa a su particular Ginebra. Lo que Arturo no sabe es que el loco sin rostro ha puesto nombre a sus mejores cuchilladas: y serían los de sus amigos. Así que si quiere llegar entero y verdadero al baile de graduación deberá resolver el misterio del asesino sin cara.
Desde Chile, el director de comedias Gonzalo Badilla enrola a su hermano Santiago como guionista y protagonista para verter en un largometraje su visión del cine de horror, del cual se declara fan irredento. Intentando arropar un típico slasher con el envoltorio del giallo, nos presenta una trama con fuertes dosis de comedia romántica anunciada como fiel homenaje a Carpenter, Argento, Fulci, Craven, Cronenberg y Hitchcock. Una lista de grandes clásicos que al menos ve reflejado su sabor añejo en la típica trama que su sinopsis desgrana con excesivo detalle.