Vampire Clay
Vampiros de plastilina
Junto a una escuela de arte rural se descubre una pequeña tumba que alberga lo que parece una arcilla especialmente maleable. Lo que no saben sus próximos usuarios, los alumnos de la escuela, es que dicho material es presa de una maldición que le otorga una extraña vida y cualidad, la de absorber tejidos vivos para unificarlos con la misma arcilla. Arte y gore dándose la mano en una obra sin miedo al absurdo.
“Vampire Clay” (“Chi o su nendo”) es una nueva obra casposa salida del país del Sol Naciente, esta vez el humor nace de forma involuntaria al contrario de lo que podría sugerir su nacionalidad. Es decir, aunque actualmente el cine de género también pase por horas bajas en Japón, todos recordamos la actitud gamberra y cretina de su característico splatter , capaz de reinar en la parrilla durante un breve periodo de tiempo como demostraron “Versus”, “Dead Sushi”, “Zombie Ass”, “Gothic Lolita Psycho” u otras obras de mayor calidad como “Tokio Gore Police” o “Tomie Reborn”.