Trabajando a la sombra de un policía veterano, el intrépido detective Ezekiel “Zeke” Banks y su compañero novato toman las riendas de una investigación relacionada con una serie de asesinatos que albergan ciertos paralelismos con el sangriento pasado de la ciudad. A medida que profundiza en el misterio, Zeke descubre que él mismo se ha convertido en el epicentro del macabro juego del asesino.

Y así, damos la bienvenida a otra entrega de la saga Saw. Para ser concretos, la novena. Claro que, esta vez, todo indica que intentan salir de la saga numerada para irse al tan moda reboot. Un reinicio, vaya. Algo que con el título, ese Spiral, ya se intuye. También, una vez visto el trailer, por el tono de la propuesta, mucho más en la línea del thriller policíaco con psicópata a lo Seven (1995) o, sin ir más lejos, la primera entrega de la franquicia ¿Se habrá escatimado en gore y truculencias retorciadas varias para centrarse en la trama y los personajes? Puede que, después del in crescendo en estos aspectos que tomó la saga, que incluso nos lanzó los miembros cercenados a la pantalla con el 3D de la séptima entrega, hayan preferido esta opción. Obviamente, sin dejar a un lado la violencia y algunas secuencias de impacto.

El fenómeno de las salas de escape no es que estuviera tardando en llegar a las pantallas, pues esta es ya la cuarta adaptación del concepto que se lleva al cine. Eso sí, es la primera en alcanzar una cota de aceptación por parte del público suficiente como para no esconderla bajo la alfombra. De hecho, está llamada a convertirse en la nueva saga ultra rentable del terror palomitero de los próximos años. La nueva Saw, ni mas ni menos. Thriller trampero de carácter urbano y actual. Con carnaza multiclase para el bodycount.

Seis desconocidos de distinta clase y condición social reciben invitación para jugar una partida conjunta en el que es conocido como el escape room más difícil jamás creado. Todo aquel que consiga salir de el recibirá una gratificación de 10.000 dólares. La decisión es unánime. Pero cuando el juego da comienzo todos se dan cuenta de que aquello va mucho mas allá de un simple juego inmersivo y que deberán resolver todos los puzles de cada una de las salas si quieren salir de allí con vida

Lo reconozco, yo fui muy fanático de las entregas intermedias de la saga de Jigsaw. Tener un capitulo nueva cada año era una costumbre que disfrutaba un montón. O sea que, a distinto nivel, me parece que Escape Room y yo nos vamos a llevar bien.