Night of the Hunted

Alexander Aja es, además de director, productor de cine y guionista. En esta labor de financiar proyectos, demuestra nuevamente su amor por el género. Es el productor detrás del último film de Franck Khalfoun, que analizamos en esta reseña, con quien había trabajado en calidad de guionista en el remake de Maniac y en su cinta (muy similar a ratos a la que nos ocupa) Parking 2, y que interpretaba también un papel en la mítica Haute Tension; es decir, que la relación de ambos es estrecha y de largo recorrido. Night of the Hunted es un film con todo el sabor de este tándem: tensión y mucha sangre. También es una adaptación muy libre, tanto que escapa de la definición de remake, de una cinta de ínfimo presupuesto española: La noche del ratón.

La protagonista es una ejecutiva que, regresando a medianoche de un congreso junto a su jefe y amante, para en una estación de servicio a repostar. A primera hora de la mañana ha de estar en casa junto a su novio, que no sabe que ella le es infiel, para acudir a una clínica de fertilidad. Una vez dentro de la tienda de la gasolinera, será atacada por un francotirador que, apostado en lo alto de un cartel, va a convertir esa noche en una pesadilla.

Con un potente primer acto, después pierde fuelle. Khalfoun presenta un film en la línea de Phone Booth, de la española El desconocido o de la argentina 4X4, donde, tras la presentación de los personajes y de la premisa inicial, comienza un toma y daca dialéctico entre víctima y ejecutor en el que ambos desnudan su alma y se posicionan en polos opuestos respecto a su visión del mundo y, en este caso, también de su visión política, pues nuestro asesino parece repetir palabra por palabra un discurso de Trump. Pero, además, y aquí está la gracia de estos formatos, el acoso también sirve de terapia para que el asediado de turno se enfrente cara a cara a sus contradicciones, suponiendo una experiencia, en cierta medida, sanadora. Pero, por si estas reflexiones se nos hacen bola, Night of the Hunted llega cargada de sangre. Este tirador tiene un buen índice de aciertos y da en lugares del cuerpo donde las heridas lucen. Además, el guion se las apaña para que no le falten objetivos donde apuntar.

Entre los aciertos de la película encontramos un excelente uso del espacio escénico que nos ayuda a ver claramente desde dónde viene la amenaza y cuáles son los posibles puntos de escape. También a tener claro en todo momento las posibles herramientas y objetos que pueden ayudar a que esta víctima escape de su acosador. A lo MacGyver, nuestra heroína se vale de los artículos de la tienda para crear distracciones, curar heridas o moverse fuera del alcance del asesino. Recursos y herramientas tan coherentes que ayudan a que esta lucha por la supervivencia se mantenga en el terreno de lo verosímil… o casi.

Otro acierto, para mi gusto una idea estupenda, es el enorme cartel desde el que dispara nuestro asesino. Las letras GODISNOWHERE ocupan, con espacios equidistantes, este cartel de carretera, creando con esto un interesante juego de palabras, pues será el espectador quien decida si pone “Dios está aquí en este momento” o “Dios no está en ninguna parte”. Dos sentencias tan contradictorias como lo son los puntos de vista de los personajes.

Entre los elementos menos positivos de esta cinta encontramos un guion algo deslucido en su discurso, donde falta astucia o sutileza a la hora de desarrollar sus temas, obligando al espectador a comulgar con algunos diálogos forzadísimos. Tampoco es demasiado comprensible, algo que sucede en casi todos los filmes de este corte, la necesidad que tiene el asesino de explicar la naturaleza de sus acciones a una persona a la que quiere matar o porque no decide bajar a finiquitarlas antes y les da tiempo para preparar una defensa.

Sin ser una gran cinta Night of the hunted da lo que uno busca en estos formatos. Contiene un buen trabajo en la dirección de sus actores y, pese a ciertos desequilibrios en el ritmo de su narración, logra mantenernos como espectadores lo suficientemente interesados hasta la conclusión de esta noche de pesadilla.