- Título original: Cheun
- Nacionalidad: Tailandia | Año: 2009
- Director: Kongkiat Khomsiri
- Guión: Wisit Sasanatieng, Kongkiat Khomsiri
- Intérpretes: Arak Amornsupasiri, Jessica Pasaphan, Artthapan Poolsawad
- Argumento: Un asesino en serie mantiene en jaque a la policía tailandesa, y su única esperanza son los recuerdos de un ex-convicto.
1. ESTIGMAS:
Nacer en Tailandia conlleva varios estigmas, siendo uno de ellos el propio hecho de nacer en este determinado país, parque de atracciones de la cara más despreciable de la humanidad. Si naces allí tienes MUCHAS posibilidades de acabar conociendo ese lado tenebroso, si eres de los pocos que tienen pasta la usas para conseguir más, haciendo lo que sea y, si además, disfrutas con la sensación es muy probable que quieras conocer lo que se siente al ejercer ese poder sobre una persona; pero ese no es un estigma, el que sí lo es, es nacer en una familia pobre. Y ser pobre en Tailandia significa vivir hora tras hora haciendo lo posible por huir de la desesperación que obliga a elegir entre comer o no comer, vivir o no vivir.
No quiero detenerme mucho en esto – me imagino que ninguno de vosotros/as vivirá en el mundo de chupipiruli y , aunque joda acordarse, se le revolverán las tripas – pero hay un tercer estigma, el de la homosexualidad, que es básico para entender la película. Por varias razones, eso sí, y yo destacaría dos: 1ª La propia confusión que existe en el país al respecto, ya que mientras las leyes del país nunca lo han tipificado como delito, sí que lo consideraban hasta hace no demasiado, como una enfermedad con la que nacía y se podía curar; y en el propio Tipitaka (la sección canónica del manual budista Theravada) al mismo tiempo lo condena y lo acepta como algo que ha existido siempre. Y 2º, como afecta esa confusión para convertirse en el refugio de los más desalmados y crueles especímenes del género humano. Todo el mundo sabe que tailandia es un país que vive del turismo sexual, pero son los propios tailandeses los que cometen las peores salvajadas, como violar repetidamente a sus hijos (e hijas), venderlos al por mayor y luego repudiarlos por ser mercancia caducada. Así que con estos tres estigmas: tailandés, pobre y gay, podría decirse que lo normal es que tu vida apenas llegue a los 20, y si llegas estás muerto por dentro.
2. EL CASO:
Dentro de la novela negra hay varias formas de comenzar una historia, pero las más comunes son: un hecho nimio y aparentemente intrascendente que poco a poco va revelando detalles, o quitando capas, hasta descubrir algo muy gordo que suele implicar a multinacionales y mafiosos (un ejemplo reciente y muy recomendable: Tormentas Cotidianas de William Boyd); o comenzar con un hecho brutal y muy impactante, y contar como alguien ha llegado a un punto de tal brutalidad, o porqué la víctima mereció tal muerte (el amo de estas historias, para un servidor, es el gran John Connolly)
Este es el camino elegido por el guionista Wisit Sasanatieng también de películas tan curiosas como Tears of the Black Tiger o Citizen Dog) junto con el director Kongkiat Khomsiri. El hallazgo por parte de unos niños de una maleta roja de viaje flotando en el mar, y rellena con los restos mutilados y castrados de un extranjero forrado, marca el comienzo de un caso imposible de resolver. En pocos días, se apilan las maletas con los restos de empresarios, conocidos pederastas y como broche final el hijo del Primer Ministro. El caso cae en manos de Papa Chin, un policía corrupto hasta las trancas, que le pasa el caso a Tai, un joven policía que pasa sus días en una cárcel, por culpa de un caso mal resuelto (o eso piensa él…), y ejerciendo de matón para los mafiosos. Bueno, para ser concreto le obliga a resolverlo o resolverlo, y todo porqué lleva 20 años teniendo el mismo sueño en el que aparece una maleta roja…
Lo que le lleva a la aldea en la que se crió, en la que conoció a Nut, su único amigo de verdad y la persona que asocia su mente con la maleta roja, aunque no sabe muy bien porqué. O no se quiere acordar. Por qué?, pues porqué fue un amigo de mierda, a pesar de la completa devoción que sentía Nut por él, Tai hizo todo lo posible por prescindir de él, de humillarle para ser aceptado en la “banda” de crios que mandaban en la aldea, abandonarle cuando más lo necesitó…pero al mismo tiempo, tal vez por principios tal vez por pura solidaridad, le salvó de las violaciones constantes del padre, le defendió cuando a los crios se les fue la mano (escalofriante escena) y le ayudo a fugarse a Pattaya para encontrar a su madre. Esta parte de la película alterna constantes flashbacks con sus esfuerzos por resolver los crímenes y no perder a su novia Noi. No puedo contar más, sería injusto.
3.- REDENCIÓN:
Sheun es un thriller muy intenso contado con engañosa lentitud, también es un drama/denuncia sin tapujos de la vida que llevan los niños/as en Tailandia, pero por encima de todo es una desgarradora historia de amor que supera todas las barreras posibles del tiempo y la realidad. Y todo ello camuflado con una engañosa publicidad que parece enfrentarnos ante una historia de violencia descarnada, que la hay (no se corta ni con hacha a la hora de mostrar el estado en el quedan los cadáveres de los malos), pero totalmente supeditada a lo mencionado anteriormente. Los actores están absolutamente perfectos, la fotografía es, como en casi todas las produciones tailandesas, espectacular y forma parte de la propia historia como un personaje más. Tal vez lo único que me sobra es el exceso de edición y la prescindible banda sonora. Pero a pesar de esos dos detalles, Cheun ya forma parte de mis PELÍCULAS, y junto con The Horseman y MEADOWOODS es de lo mejorcito que he visto este año.Lo mejor: Practicamente todo, pero especialmente la resolución de la historia.
Lo peor: Por poner algo la BSO y un cierto exceso en el montaje.
Vuestros comentarios
1. 29 jun 2010, 15:19 | mrcelofan
85 de valoración ???
Voy a por ella.
2. 29 jun 2010, 16:24 | Victor
Lo dicho en anterior post:
Pues vista, y la verdad que me esperaba otra cosa. La película no está mal, pero la estructura de la narración es muy confusa, a ratos desesperante, es extremadamente leeeeeeenta. A excepción de los protagonistas del constante flashback que es la película, los personajes están poco desarollados, me refiero al “hawaiano” de la peli, cuyo papel por cierto es brevisimo y casi prescindible. No he visto muy bien retratado el proceso de investigación de la policía, brilla por su ausencia, a no ser que la propia investigación sea la retrospectiva que hace de su vida el protagonista. Que por cierto, sólo con esa historia se habría construido un buen drama, no veo necesario todo lo demás, (asesinatos, y todo eso), me resulta superfluo, sobra, comparado con la importancia de lo que se narra sobre la infancia. Uno se hace una idea de lo que puede ser una infancia en Thailandia.
Recomendable? Si, pero me esperaba algo diferente, será que estoy acostumbrado a los thrillers surcoreanos, que son otra historia en cuanto a ritmo, psicología de personajes, y maestria en cuanto a técnica cinematográfica.
Saludos.
Me parece algo excesivo el 85.
Buena reseña. Coincido en que es una gran historia de amor-amistad.
3. 29 jun 2010, 18:29 | elniniodecristal
Víctor: en cuanto la la lentitud de la película, y la puntuación, son temas tan subjetivos y personales que es difícil discutir sobre ellos; y sino piensa en directores tan enormes como MICHAEL HANEKE, THEO ANGELOPOULOS, los hermanos