Room 237
Vivisección de un clásico
- Título original: Room 237
- Nacionalidad: USA | Año: 2012
- Director: Rodney Ascher
- Guión: Rodney Ascher
- Intérpretes: Bill Blakemore, Geoffrey Cocks, Juli Kearns
- Argumento: Entusiastas de El resplandor analizan las imágenes del film en busca de sentidos ocultos.
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ORIGINALIDAD: | |
GORE: |
- 3.5/5
Cualquiera que conozca a un conspiparanoico, yo trabajo con alguno, habrá disfrutado de la maravillosa imaginación que tienen los mismos para sacar lecturas, claves y secretos ocultos de cualquier acontecimiento u objeto. Desde un cuadro de Da Vinci, al dibujo de un billete de euro, o las figuras de un paquete de Camel… cualquier cosa es buena para desplegar toda una teoría de invasiones alienígenas, estrategias templarias u otras sociedades secretas que, con invisibles hilos, tratan de controlar nuestra minúscula existencia. Al margen de lo interesantes o lúdicos que sean los argumentos esgrimidos, lo que demuestran es que la realidad la construimos en función de nuestro mundo interior y buscamos en ella los caminos para exponer o justificar este mundo a los demás.
En el documental Room 237 varios entusiastas de la obra de Stanley Kubrick El resplandor analizan a conciencia las imágenes del film en busca de sentidos ocultos del mismo. En su viaje por los fotogramas de este clásico descubriremos una crítica al genocidio de los nativos norteamericanos, o tal vez al exterminio nazi, o puede que lo que se esconda sea la confesión de que la llegada del hombre a la luna fue en realidad una farsa orquestada por la Nasa y dirigida por el propio Kubrick… Un sin fin de teorías encontradas sobre una machacona y obsesiva repetición de planos.
Al margen de lo factibles o lo ciertos que sean los enigmas que se plantean, Room 237 resulta ser un refrescante y divertido análisis de la creación cinematográfica. También es un homenaje a la naturaleza reflexiva del espectador cinéfilo y de su, en ocasiones ridícula, búsqueda constante de metalenguajes y guiños a la intelectualidad. Pero, además, es una película que viene a ensalzar y coronar el increíble trabajo artístico y cinematográfico que es El resplandor, su modernidad, su encanto especial e hipnótico desarrollo. Algo que hace que te animes a regresar al hotel Overlook, nada más terminar de verla, en busca de tus propios misterios.
Lo mejor: El montaje de imágenes y las constantes repeticiones que lejos de aburrir hipnotizan. Indispensable si te gusta "El resplandor".
Lo peor: Algunas de las claves (como la del pene ficticio) son una completa tontería, así que si buscas un documental serio, saldrás despotricando.