Posesiones

13 exorcismos

Sacristán exorcista

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The Atticus Institute

Satán Vs. Ciencia

The Atticus Institute

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DIVERSIÓN:
TERROR:
ORIGINALIDAD:
GORE:
  • 3.5/5

The Atticus Institute

Este documental saca a la luz el terrible caso de Judith Winstead: una mujer que fue estudiada durante 1976 en el Instituto Atticus, famoso por sus investigaciones sobre fenómenos paranormales. Lo que al principio parece un simple caso de autismo, telequinesis y precognición, se convierte en un evento de dimensiones nacionales en el que tiene que intervenir el ejército, con funestas y obvias consecuencias. Cuarenta años después, verán la luz los detalles del único caso de posesión filmado y verificado por científicos.

Se supone que el miedo es la perturbación angustiosa que sentimos ante un riesgo, ya sea real o ficticio, pero este último pasa por verídico ante el asustado ojo del espectador. Entonces, cuando hablamos de sentir miedo ante una narración, la clave estría en hacer pasar como real una historia que sabemos falsa; y la base de este logro radica en la autenticidad de como se expone dicha narración y la capacidad de la misma para suspender la incredulidad del receptor, implicándole de alguna forma, como por ejemplo apelar a fobias o experiencias personales traumáticas. La realidad supera a la ficción, decimos, pero de nuevo el arte, cine en este caso, se yergue para demostrarnos que, en una doble pirueta, las barreras entre vigilia y pesadilla se pueden desmoronar en un ejercicio intelectual muy placentero. Si bien “The Atticus Institute” fallará probablemente en involucrar al espectador como si fuese un personaje más de la trama, sí conseguirá suspender su escepticismo ante un falso documental tan bien realizado que podría estar siendo emitido ahora mismo por televisión.

Lo mejor: La capacidad para pasar por un verdadero documental. Excelente soporte de los actores.

Lo peor: Un final demasiado espectacular y tópico.


Grace: The Possession

Call of Satan, Devil's Warfare

Grace: The Possession

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DIVERSIÓN:
TERROR:
ORIGINALIDAD:
GORE:
  • 3/5

Grace: The Possession

Recién llegada a la facultad, Grace encuentra que su rígida educación, tras las faldas de una abuela conservadora y ultra católica, chocan frontalmente con la lujuriosa desinhibición del campus. Ambiente que termina por meterle el diablo en el cuerpo a nuestra guapa jovencita, para pena y dolor de todos los que la rodean, víctimas de una venganza sobrenatural que podría extender sus garras hasta el mismo Vaticano.

“Grace” es una serie B sobre posesiones que no destacaría en nada de no ser por su formato: la vista en primera persona, y es que, como si de un “Doom” se tratará, viviremos la acción de primera mano desde los ojos de nuestra protagonista. En este caso Grace, una angelical muchacha, interpretada por una bellísima Alexia Fast (como detalle gracioso comentar que también interpreta a su propia madre), que sale de las faldas de su católica abuela para celebrar sus recién cumplidos dieciocho empezando una carrera universitaria. Que el arranque de la cinta no os engañe, la vista subjetiva corresponde a un solo personaje, al poco entenderéis quien es el interfecto; entrar más al detalle sería desvelar parte de la historia.

Como ya hiciese “Maniac” (igualmente la versión original que la moderna) esta forma de presentar la narración ayuda muchísimo al espectador a involucrarse emocionalmente con la protagonista, además de envolvernos con los hechos de manera lograda y harto natural: por ejemplo, los escasos sustos son bastante agradecidos y alcanzan un efecto que su propio planteamiento nunca hubiera logrado. Todo un acierto esta perspectiva que, además, podría haber sido un desastre, un mareo, y sin embargo ha sido tratada con inteligencia y cuidado, haciendo de “Grace” una obra muy entretenida y compacta, estéticamente hablando. Supongo que parte del éxito se debe al par de cortos sobre el video juego “Call of Duty” que realizase Jeff Chan, director de Grace. Por cierto, únicos avales del citado director, lo cual refrenda aun más su excelente trabajo tras las cámaras, puesto que los distintos planos siempre favorecen la acción y además ocultan las carencias presupuestarias que únicamente asoman su feo rostro en cuanto a varios efectos especiales (horrendos) se refiere.

Lo mejor: La visión subjetiva.

Lo peor: Los agujeros del guion.


REC 4: Apocalipsis

En el mar nadie escuchará tus gritos

REC 4: Apocalipsis

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DIVERSIÓN:
TERROR:
ORIGINALIDAD:
GORE:
  • 3/5

REC 4: Apocalipsis

La saga creada al alimón por Paco Plaza y Jaume Balagueró, es sin duda, uno de los referentes del buen hacer del fantástico nacional. Una colección de cuatro títulos que ha sabido jugar sus cartas y retorcerse, argumentalmente, para ofrecer al espectador algo distinto en cada una de sus entregas: si la primera nos narraba las desventuras de una joven reportera, Ángela, encerrada en un edificio plagado de vecinos infectados por un extraño virus (todo en formato found fotage), la segunda parecía un más de lo mismo hasta que descubríamos SPOILER que los infectados eran en realidad seres poseídos por una fuerza demoníaca FIN DEL SPOILER. Tal vez conscientes tanto de la saturación de zombis en la industria y del material encontrado como recurso narrativo, REC 3 abandonaba su look doméstico y apostaba por la narración convencional y por no tomarse en serio, creando una comedia que sorprendió a muchos y disgustó a los seguidores más puristas.

Balagueró, en esta última entrega, retoma a la protagonista de los dos primeros filmes: Ángela (Manuela Velasco) y comienza la acción en el punto donde finalizaba REC 2; creyéndose finalmente a salvo, la reportera despierta en una instalación científica en medio del océano. Ella, junto a otros supervivientes de las tres cintas anteriores, serán conejillos de indias para una serie de experimentos que tratan de indagar sobre la naturaleza de esta amenaza. Un accidente y una comida pesada servirán de desencadenante de un nuevo brote al que tendrán que hacer frente, con uñas, dientes y objetos afilados, los pocos no infectados que, para colmo ,están encerrados en medio de ninguna parte.

Estamos ante la entrega más comercial y más dinámica de esta tetralogía y desgraciadamente también ante la menos terrorífica; la buena noticia es que es la que mejor equilibra acción, humor, sangre y supervivencia. El salto del guión a una instalación en mitad de mar elimina ese aroma de terror doméstico, en espacios conocidos en el día a día, que tan bien funcionaba en sus dos primeras entregas. En su lugar la película nos emplaza en un escenario más propio de títulos norteamericanos y termina por crear en este REC 4 un Resident evil a la española… Los pasillos y recovecos son un lugar perfecto para que este director se luzca con lo que mejor sabe hacer: usar la profundidad y los espacios fuera de campo para crear tensión y logra una película casi igual de claustrofóbica que en su primera entrega.

Lo mejor: El nuevo giro respecto a la naturaleza del brote y Manuela Velasco repartiendo caña.

Lo peor: Aún cuesta trabajo ver ciertos códigos del cine comercial norteamericano en cintas nacionales... Pese al esfuerzo se nota cierto desgaste en la fórmula.


El último exorcismo Parte II

¿Pero no había sido el último?

El último exorcismo Parte II

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DIVERSIÓN:
TERROR:
ORIGINALIDAD:
GORE:
  • 1/5

El último exorcismo Parte II

Venga, no podía obviar el chiste fácil. No obstante, si lo buscas tiene su explicación. Se supone que era el último exorcismo del protagonista de la primera parte, el padre Cotton. La historia de la secuela, pese a conservar a su otro personaje importante, la joven poseída Nell, cambia totalmente de escenario, personajes e incluso pretensiones. Eso sí, un titulo más original no hubiera hecho daño. Al grano.

Esta Parte II es una basura.

El último exorcismo (2010), pese a un decepcionante desenlace que es imposible no agriete parte de lo visto anteriormente, fue un digno found footage. De los más dignos dentro de la avalancha que nos ha llegado en los últimos años. Y lo era, sobre todo, porque durante el comienzo y el desarrollo se molestó en ir más allá. Entraba en la línea, bastante extinta, del terror con crítica a la religión extrema y sus desaforadas creencias. Cotton, un vendehúmos que se topa con un caso presuntamente verídico. Pero que, como nosotros, intenta entenderlo más como enfermedad de la joven que como acontecimiento paranormal. Se crean dudas durante la película, aunque, al final, prefiere tirar por los derroteros pisados una y otra vez. Vaya, que sin ser una gran obra, sí hubiese sido más interesante con una vertiente diferenciadora. Y si no, haber puesto los papeles sobre la mesa desde el principio como la muy infravalorada The Devil Inside (2012) .

Con todo, se convirtió en todo un éxito de rentabilidad: con un exiguo presupuesto de 2 millones de dólares se hizo en todo el mundo con una recaudación de 67 millones. De nuevo acertaba su productor, el tan amado como odiado Eli Roth, sabiendo cómo vender un producto pequeño a nivel mainstream y, para colmo, generar escuela. ¿Cuántos found footage de posesiones se han estrenado, en cine o video, desde entonces? Pues eso.

Lo mejor: Ashley Bell

Lo peor: Prácticamente todo lo demás.


Posesión Infernal (1981)

Cómo hacer un film de culto con el “monedero del abuelo”

Posesión Infernal (1981)

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  • Título original: The Evil Dead
  • Nacionalidad: USA | Año: 1981
  • Director: Sam Raimi
  • Guión: Sam Raimi
  • Intérpretes: Bruce Campbell, Ellen Sandweiss, Betsy Baker
  • Argumento: Cinco chicos van a pasar el fin de semana a una cabaña perdida en un espeso bosque . Una vez instalados, y mientras están cenando, la trampilla del sótano se abre de golpe.

DIVERSIÓN:
TERROR:
ORIGINALIDAD:
GORE:
  • 4.5/5

Posesión Infernal (1981)

Muchas gracias a nuestro amigo Nicolás Vera, de Colombia, por enviarnos unas fotografías de Evil Dead en alta resolución.

Aprovechando el remake que se estrenó hace unos meses en nuestro país, vamos a revisionar el original Evil Dead (Posesión Infernal) de Sam Raimi.

Evil Dead llegó en los prolíficos años 80 a los cines de todo el mundo. Era una época en que las películas de terror se hacían como salchichas. Estaba de moda el gore violento, las películas de zombis italianas, los slashers americanos y las incursiones patrias hacia el género. Entre tantas películas de terror que se producían al año era normal tragarnos bazofia tras bazofia y, de vez en cuando, encontrar alguna joya de la corona. Los videoclubs se frotaban las manos con las películas de terror, que eran de las más solicitadas entre su oferta e incluso tenían su propio apartado en las estanterías. En los cines había mucha libertad desde el punto de vista de la distribución y la gente acudía con entusiasmo a las maratones de cine de terror de los viernes noche, donde te ponían tres o cuatro películas sin interrupción. Algo así como un mini-festival de Sitges. Eran otros tiempos, y en ellos el cine de terror tenía una audiencia muy definida. Era normal ver una cola de media hora o más para ver la última entrega de Viernes 13 o incluso una serie B italiana.

Hace apenas unas semanas que fui a ver el remake de Evil Dead y en la sala éramos seis personas. Los tiempos han cambiado mucho y el cine de terror en las salas cinematográficas está prácticamente muerto. Los videoclubs están en desuso y las películas de terror llegan en cuentagotas… las que llegan, que muchas ni siquiera lo hacen. Internet se ha apoderado de la parcela dejada por cines y videoclubs que, a medida que los tiempos fructíferos han cambiado a peor, han abandonado aquel que en su día fue un género en auge. Ahora se acude a la importación, a la compra internauta para buscar esos títulos que no nos llegan, y a esas otras prácticas de las que no es menester hablar ni aquí, ni ahora.

Lo mejor: Que exista.

Lo peor: No haberla visto nunca.


The Devil Inside

¡Exagerados!

The Devil Inside

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DIVERSIÓN:
TERROR:
ORIGINALIDAD:
GORE:

The Devil Inside

The Devil Inside se estrenó en los Estados Unidos recaudando unos sorprendentes 33 millones de dólares en el primer fin de semana. Sin embargo, los posteriores descensos fueron tan agudos que el total se plantó en unos, aún así excelentes, 54 millones. Hablamos de una producción de 1 mísero millón de dólares, lo que viene a ser la mitad de la media presupuestaria de, por ejemplo, nuestro cine español. En todo el mundo su total asciende a 101 millones ¿Un exitazo, verdad? Si nos ceñimos a lo económico, no cabe duda. Pero, ¿qué se ha dicho sobre ella? Aquí la suerte da un giro radical. Y es que, no pocos la han escupido, odiado e insultado. Muchos aseguraron que se trataba de la peor película de los últimos años, y muchos otros se sintieron estafados. En IMDB tiene una media de 3,9 mientras que en Filmaffinity no llega a 3,5. En Rottentomatoes únicamente se encontraron un 7% de valoraciones positivas de los críticos, mientras que en Metacritic un 18% dijeron algo bueno. Por todo esto, el aquí firmante comenzó el visionado con las peores expectativas, dispuesto a verla y, justo después, ponerla verde en la reseña que tenéis ante vuestros ojos. La cosa es que…

¿Realmente es tan mala?

Sinceramente, no. Lo que le ha ocurrido a The Devil Inside es el efecto “bola de nieve”. A veces ocurre para bien, y otras veces para mal. Aquí se da el segundo caso. Os pondré un ejemplo: cuando se estrenó El bosque (2004), muchos, entre la crítica y también entre algunos sectores del público, le tenían ganas a su director, M. Night Shyamalan. Estaban esperando que con la siguiente película la cagase y saliera derrotado de una vez por todas. El ser humano es así. Pues bien, la crítica, efectivamente, se cebó con ella. Incomprensiblemente (pues es una producción con factura impecable, buenas interpretaciones, dirección llena de detalles de calidad, banda sonora que pone los pelos como escarpias y guión, no sobresaliente, pero sí interesante) muchos afirmaron sin rubor que se trataba de la peor película del año. El público siguió la bola de nieve. Las opiniones negativas, cercanas al odio, crecían a ritmo vertiginoso. Parecía que la gente iba a verla para criticar, y si no seguías el rollo eras raro o no entendías. ¿No había ese año doscientas películas objetivamente peores que El bosque a las que nadie odiaba? Desde luego, pero eso es lo que pasó.

Lo mejor: Los exorcismos.

Lo peor: El desenlace.