Residue

El investigador privado Luke Harding roba un raro tomo de hechizos propiedad del señor de los bajos fondos, el Sr. Fairweather. El libro es un artefacto sobrenatural muy buscado y peligroso, el rival más peligroso de Fairweather, el enigmático Mr. Lamont, persigue a Luke con sus violentos secuaces. Mientras el submundo criminal anda desesperado por hacerse con el libro y usar su poder para sus propios intereses, el Mal comienza a arraigar en el apartamento de Lucas, poniendo su alma eterna y la de su hija en peligro.

¡Ostia que póster tan feo! Y aún así, no sé qué extraño morbo se ha despertado dentro de mí que me apetece un montón ver “Residue”, surgida de las cloacas canadienses. Quizás se trata de esa extraña mezcla de cine negro, lucha libre, demonios, excrecencias varias y tomos prohibidos. Lo que desde luego no genera expectación es su acabado barato y el elenco elegido, y eso que cuenta con dos viejos secundarios de lujo como son William B. Davis (el fumador de “Expediente X”) y Matt Frewer (el mismísimo Max Headroom entre muchos otros trabajos, como Moloch en “Watchmen”). Pero quitando a estos dos señores de la vieja escuela, el resto de los actores dan una sensación de serie Z aun más pronunciada a este residuo, gracioso nombre que ya preludia las bromas sobre higiene masturbatoria.

Al frente, y siguiendo con las malas noticias, encontramos a un tal Rusty Nixon, del cual analizamos su filmografía y entran ganas de llorar. No obstante seamos honestos, por estos lares ya poca gente se gasta un céntimo en ver cine de terror, mucho menos comprar tomos macabros. Y si lo hace, desde luego no invierte sus ahorros en productos de esta calaña. Así que si terminamos viéndola no nos rasguemos las vestiduras y asumamos que nuestra búsqueda, en este caso, se reducía a alimentar neuronas a base de basura. Quién sabe si atraídos por ciertos fotogramas sangrientos o por esa enfermiza obsesión que algunos tenemos, apúntenme por favor, al terror sobrenatural de entreguerras. El 18 de Julio será la fecha para descubrir si esa mierda de póster hace justicia a la película, espero que sí.