Fish & cat
El único slasher único
DIVERSIÓN:
TERROR:
ORIGINALIDAD:
GORE:
Reconozco que la primera vez que intenté ver Fish & cat no aguanté más de 35 minutos. Fue en una sesión a medio día en el festival de cine de Sitges de 2014; el peor lugar para ver una propuesta de 135 minutos que precisa de un espectador paciente y que reme a favor de obra para ser engullido por sus múltiples virtudes. Imagino que jugó en contra de la cinta que se la vendiese como el primer slasher iraní, algo que no era en absoluto… ¿o me confundo? Cabe preguntarse por qué esa etiqueta de slasher, o incluso qué es un slasher. Para mi, si lo planteo de forma sencilla, el género slasher es una película en la que un grupo de personas (generalmente adolescentes) muere a manos de un asesino o de varios… claro. Siguiendo esas reglas, esta cinta en la que varios jóvenes acampan en un lago junto a un restaurante regentado por unos caníbales parece inscribir con facilidad en ese subgénero, al menos hasta que la ves.
Como todos los años, un grupo de adolescentes iraníes se reúne alrededor de un lago para celebrar un festival nocturno. Acuden con sus cometas que elevarán a medianoche. Muy cerca de ellos, en un restaurante que durante los créditos iniciales se nos indica que regentan unos caníbales, dos cocineros trasladan al corazón del bosque los restos sangrantes y putrefactos de sus últimos banquetes.