Incarnate

Un científico, con la capacidad de entrar en las mentes subconscientes de los poseídos, debe salvar a un niño de las garras de un demonio, con poderes nunca antes vistos, mientras se enfrenta a los horrores de su pasado.

Encarnado – je, je, je – por Aaron Eckhart (“Objetivo: Londres”, “El Caballero Oscuro”, “Yo, Frankenstein”), el exorcista de “Incarnate” representa un tipo muy particular de exorcista: el científico. Con ecos de “The Cell”, siempre recomendable, o de “Dreamscape”, menos eficaz, el psicólogo protagonista de la última producción de “Blumhouse” gusta de adentrarse en la mente de sus pacientes para sacar al diablo por aburrimiento, recitándoles pasajes enteros del perverso polimorfo llamado Freud. Y aunque se note el cachondeo implícito, por aquello de que esta película parezca recién salida de la cadena de montaje, también es cierto que su tráiler promete algo más de entretenimiento cateto del que media dentro de la famosa “Blumhouse”. Probablemente se deba a que en el ajo está metida la “WWE”, la empresa líder en la lucha libre = diversión descerebrada. El emporio presidido por Vince McMahon, al que le sobra dinero tanto para producir películas como para apoyar a candidatos políticos afectados cerebralmente por la polio, ya hizo comandita con los productores de “Insidious” y “Paranormal Activity” (LA FRASE™) pariendo “Oculus”. Si el resultado de “Incarnate” queda medianamente parejo ya me doy con un canto en los dientes.

Después de los avales económicos queda fijarse en los artísticos, representados por Brad Peyton, director de “San Andrés” y “Viaje al centro de la Tierra 2: La isla misteriosa”, además de tener en cartera la pre producción de “Rampage”, película basada en el famoso vídeo juego de los ochentas. Todas ellas protagonizadas por “The Rock”, el ex luchador de la “WWE” metido a actor que actualmente puede aparecer hasta de tu taza del retrete. ¿Casualidad? ¿Conspiración? ¿Me importa un huevo? Acompañando a Peyton, como guionista a la sazón, encontramos a Ronnie Christensen, cuyo mayor logro ha sido escribir “Marea Letal”, con la “follastible” Halle Berry. Es decir, una porquería de avales artísticos, pero os tendréis que conformar con ellos o verla el próximo 2 de Diciembre, mercado doméstico USA, para opinar. Un servidor casi espera que tire por el lado más casposo y barriobajero del cine de poseídos, bastantes desangelado actualmente.