Pobres criaturas

La película que reseñamos hoy y que pudimos ver en el pasado festival de Sitges va a ser un bombazo. Su estreno en salas en enero marcará el pistoletazo de salida de un año que esperemos que, en lo tocante a cine fantástico, sea mucho más potente que el actual (no lo tendrá difícil). “Pobres criaturas” es el nuevo título del inclasificable director griego Yorgos Lanthimos que ya ha coqueteado con el cine de género en "Canino", "Langosta" o "El sacrificio del ciervo sagrado"; en esta ocasión firma la cinta con más fantasía de su trayectoria, con una marcada estética pretendidamente añeja, toques de Steampunk y mucho, muchísimo humor que por momentos nos recuerda a Tim Burton cuando hacía películas buenas.

La cinta “Pobres criaturas” está basada en la novela homónima de Alasdair Gray. En ella, el científico Dr. Godwin Baxter (interpretado por Willem Dafoe) crea una suerte de Frankenstein femenino con un cerebro tan virgen que nadie sabe si logrará alcanzar el nivel cognitivo de un humano adulto. El ayudante del doctor, interpretado por Ramy Youssef, supervisará el desarrollo de esta criatura, bautizada como Bella Baxter, a la que pondrá voz y sensual cuerpo la actriz Emma Stone. Bella comenzará a demostrar un carácter intrépido y buena capacidad para repetir acciones y palabras. La película se centra en la aventura de Bella por explorar sus límites erógenos al tiempo que desarrolla una indómita inteligencia tanto intelectual como sentimental

El cine ha tenido una deuda con el mundo femenino y su visión de la realidad. Aunque en su nacimiento era frecuente encontrar mujeres realizadoras, estas han sido tragadas por la historia. Siendo justos, el cine clásico tiene siempre un sesgo masculino (que no necesariamente machista) y prácticamente hemos tenido que esperar a los años 70 para que las mujeres fueran reconquistando la silla del director. En el terror no es diferente, pese a que en España Josefina Molina o Pilar Miró coquetearon con el fantástico e imagino que en otras cinematografías pasó igual. Kathryn Bigelow, quien también ha sido la primera directora en ganar un Oscar, es con “Los viajeros de la noche” la primera que recuerdo firmando un film de horror. En los últimos años, Jennifer Kent o Ana Lily Amirpour, Carlota Pereda en España, Michelle Garza Cervera y Gigi Saul Guerrero en México, están aportando su enfoque y temáticas femeninas al horror. A pesar de esto, aún queda mucho por hacer...

Es en cualquier caso paradigmático que dos hombres, Lanthimos en la dirección y Gray como autor, hayan creado la mujer  más valiente, libre y feminista del cine en muchos años; aunque para ser justos hay que añadir a la receta la audacia y el talento de Emma Stone que está descomunal. Y lo más portentoso de este film es que hará reír por igual a Santiago Abascal (aunque no entienda la profundidad del chiste) que a Despentes. 

Bella Baxter, emprenderá un viaje por el mundo con diferentes etapas, donde probará todas las  intensidades del placer sexual, a través de un variado surtido de hombres, siempre con una mirada constructiva pero al mismo tiempo crítica respecto a la masculinidad. Lo hará primera ante la mirada atónita del doctor ayudante, que poco a poco irá enamorándose de ella, y posteriormente de su marido (Mark Ruffalo, que también está excelente) un Don Juan completamente superado por su mujer, a la que pensaba iba a doblegar con su encanto varonil. 

En un cine de gran estudio, supeditado a la taquilla y sin ganas de crear controversias, "Pobres criaturas" es toda una rara avis. Desnudos integrales, prácticas sexuales la mar de variadas, promiscuidad, la masturbación o la prostitución, se contemplan sin prejuicios ni estigmas; es más, hasta adoptan un tono lúdico y educativo. Y una actriz de prestigio como es Emma Stone pone toda la carne en el asador (nunca mejor dicho) para abordar escenas complejas, siempre rodadas con gran elegancia, pero realmente expuestas para una artista metida de lleno en el Star system.  

Algo parecido pasa con las imágenes macabras. Sin ser una cinta que pretenda ser gore, a Lanthimos no le tiembla el pulso al filmar las prácticas quirúrgicas de sus doctores, o de crear seres grotescos cosiendo, por ejemplo, patos con perros… Incluso creo recordar que en uno de los juegos de Bella, cuando ésta aún se encuentra en una fase mental muy primitiva, se ceba con un bisturí sobre un cadáver. 

Visualmente la cinta es una delicia. Como decía al comienzo su estética se acerca al universo de Burton, también al de Julio Verne y al terror gótico de la Hammer. Tira, para generar este mundo, de unos espectaculares efectos especiales y un atractivo manejo del color. Añadir a los valores técnicos, su osada banda sonora deliberadamente desafinada; aunque para algunos espectadores más que un acierto les pareció algo cargante. Es cierto que en ocasiones puede tener una presencia demasiado marcada, aunque entiendo que es algo totalmente intencionado por parte del director. 

Antes de indicar el punto más negativo de este producto es importante volver al humor. "Pobres criaturas" es realmente divertida y esta llena de mala leche. Las ideas morales y éticas de las que hace gala el personaje de Dafoe, arrancarán sonoras carcajadas hasta que el de Stone tome peso, pero a partir de que la criatura forme frases coherentes, será ella la que con cada sentencia nos lance un dardo a los tópicos y los principios masculinos que sustentan nuestro comportamiento occidental. Unas carcajadas que reverberan gracias a las estúpidas respuestas de los personajes que la rodean. 

Desgraciadamente el desbordante mundo de "Pobres criaturas", y su también desmedido y lenguaraz guion van acompañados de una duración excesiva de 141 minutos. Se nota que las técnicas digitales han abaratado los costes. Posiblemente el griego se podría haber ahorrado minutos quitando alguna pareja sexual o alguna conversación reiterativa, claro que Lanthimos nunca ha destacado por la contención y no lo iba a hacer en su película más ambiciosa.