Wolves
Eres un pecho lobo

Cayden Richards, 18 años y con la muerte de sus padres a las espaldas. Sometido a extraños cambios en su bien torneado cuerpo, huye de su ciudad natal esquivando el misterioso asesinato paterno durante aquella noche de luna llena en la que no recuerda nada.
Presa del destino, su atractivo rostro se da de bruces con un sorprendente vagabundo que encamina sus pasos hacia el legendario pueblo de Lupine Ridge. Tal vez allí encuentre respuestas sobre las nuevas emociones que le dominan, o puede que sólo le espere una hembra con la que emparejarse y tener una camada de sanos cachorros.
Disculpad mi cachondeo pero algo de sorna provoca el palomitero tráiler de una película (¡¿de hombres lobo?!) claramente enfocada un espectador que no supere por mucho la veintena. Lo que tampoco es malo, si me permitís decirlo, soy el primero en ponerme dogmático con esto del terror, pero no negaré lo bien que lo he pasado una vez superados los treinta con obras comerciales simplonas como ”X-Men”, “Watchmen” o “El Rey Escorpión” (para un servidor la más divertida de las nombradas). Desde luego esta Wolves, a estrenar en 2014, no creo que pueda ser considerada terror. A lo sumo por aquello de ver tanto cuerpo deseable junto. No obstante, su responsable está detrás, únicamente como guionista, de las cintas anteriormente nombradas. Os hablo de David Hayter, que debuta como director con esta Wolves, la cuál andaba terminada hará un tiempo. Hayter escribe y filma para calentar motores ante su mayor reto: la dirección de “La Viuda Negra”, spin-off de Los Vengadores