Wax
Sangre en el museo de cera
- Título original: Wax
- Nacionalidad: España | Año: 2014
- Director: Víctor Matellano
- Guión: Víctor Matellano, Hugo Stuven Casasnovas
- Intérpretes: Jimmy Shaw, Jack Taylor, Geraldine Chaplin
- Argumento: Mike es un periodista venido a menos que acepta rodarse a sí mismo durante una noche en el museo de cera de Barcelona.
DIVERSIÓN: | |
TERROR: | |
ORIGINALIDAD: | |
GORE: |
- 2/5
Mike es un periodista invitado, por una productora, a pasar una noche en el Museo de Cera de Barcelona, que se supone encantado (de conocerle). Presto se decide a participar en la especie de documental que le tendrá a él como protagonista mientras graba con varias cámaras su estancia. Allí descubre que la estrella de la función es la estatua del Dr. Knox, un asesino en serio, encerrado actualmente en prisión, cuyos crímenes caníbales escandalizaron a la opinión pública. Al tiempo de aburrirse viendo cintas de los asesinatos del doctor (pues este gustaba de grabarse para la posteridad), descubre que el asesino ha escapado de prisión. ¿Habrá acudido a visitar al pobre Mike? Pronto se iniciará un juego del gato y el ratón que nos sacará de dudas…
Durante las décadas de los sesenta y setenta proliferó en España la producción de terror fantástico, liderada por tipos la mar de simpáticos como Jess Franco o Amando de Ossorio, que acabó siendo denominada como “Fantaterror” (no confundir con un refresco aterrador), una época que un servidor no mitifica pero respeta tanto por algunos de sus títulos como por su importancia dentro del marco social que vivía la piel de toro. Sin embargo, amarga decepción la que representa “Wax”: donde algunos quisimos ver una reinvención de la citada época haciendo uso de nuevas narrativas, ahí queda como found footage más falso que la sonrisa de tu jefe, lo que tenemos es otro truño más que apostilla, tristemente, el mal estado del terror patrio, muy en línea de las trágicas sensaciones que dejaba “La Herencia Valdemar”. Un escalón por encima de ésta, el debut en el largometraje de Víctor Matellano (al cual todos los aficionados valoramos muy positivamente su “¡Zarpazos!”, tanto en versión escrita como documental) termina por ser una magnífica oportunidad perdida, ocasión para reivindicar una forma de realizar cine, barata pero elegante y llena de lo que gusta al aficionado base (atmósfera, sexo y gore), que se pierde entre los vericuetos de un guion insostenible y falto de gracia, al que se unen de forma negativa un buen número de elementos de la producción. Por otra parte, hecho que la emparenta con el cine del que intenta robar ideas, pues a excepción de cintas muy determinadas, el “Fantaterror” tampoco se caracterizó por su calidad intrínseca, si comparamos dicha producción con la de países como Inglaterra o Estados Unidos. Lo que no quita para se trate de un tipo de cine con sabor propio, sin ir más lejos ahí tenemos las gloriosas incursiones en el género que realizó el bueno de *Narciso Ibáñez Serrador.
Lo mejor: Volver a ver a Jack Taylor, entre otros clásicos del fantaterror.
Lo peor: Una historia desafortunada, rematada por un doblaje infecto.