When the lights went out
Fallida mezcla de casa encantada, poltergeist y exorcismos
- Título original: When the lights went out
- Nacionalidad: Gran Bretaña | Año: 2012
- Director: Pat Holden
- Guión: Pat Holden
- Intérpretes: Kate Ashfield, Steven Waddington, Tasha Connor
- Argumento: Una familia se traslada a Yorkshire, donde una presencia en su nueva casa perturbará sus vidas hasta límites insospechados.
DIVERSIÓN: | |
TERROR: | |
ORIGINALIDAD: | |
GORE: |
- 2.5/5
Ambientada en el 74, nos cuenta la supuesta historia real de una familia que se traslada a la casa equivocada, donde pronto — oh, sorpresa — comienzan a pasar cosas extrañas: lámparas que se balancean, objetos con voluntad propia y repentinos cambios de temperatura. Todo ello se une a que la verdadera víctima de los eventos paranormales es — oh, sorpresa de nuevo — la hija del matrimonio, una preadolescente no muy contenta de los cambios de entorno en su vida. Pero, para poner la guinda en el pastel, el matrimonio lo forman una madre obsesionada con la decoración y el orden bastante egoísta y un padre escéptico — tenía que ser así, claro está — que le da demasiado a la botella.
En esta nueva cinta, el director toma el esquema básico de la película de apariciones y la construye siguiendo los grandes tópicos que siempre vemos en ellas: la nueva casa que parece perfecta, un pasado oscuro cercano a la leyenda, médiums varios y sacerdotes de fondo, alguna que otra alma atormentada, los objetos que vuelan, el protagonismo que debe tener el dormitorio de la joven, etc. Y es que Pat Holden, que “sorprendió” en 2009 con el drama social Awaydays que prometía seguir la estela de This is England (2006), se anima en esta ocasión no sólo detrás de las cámaras, sino también detrás de la pluma, en el que es su primer largo dirigido y escrito por él mismo con un guión que en muchas partes hace aguas. When the lights went out juega aún así una baza a su favor, toma ese recurso tan explotado de la “historia real” — Esperad… No es un recurso, que esto pasó de verdad… ¿o no? — que le da un interés creciente a la película. El problema del guión, en mi opinión, es algo así como la impaciencia del desarrollo de la misma historia: todo ocurre excesivamente rápido y los lapsos que se podrían aprovechar de la película se quedan en nada.
Lo mejor: La interpretación de la joven protagonista y su fiel amiga.
Lo peor: El ritmo excesivamente rápido que coge y la mezcla de géneros que no la terminan de definir.