Beau tiene miedo
Mojón elevado
- Título original: Beau is Afraid
- Nacionalidad: Canadá | Año: 2023
- Director: Ari Aster
- Guión: Ari Aster
- Intérpretes: Joaquin Phoenix, Nathan Lane, Patti LuPone, Amy Ryan, Michael Gandolfini, Parker Posey
- Argumento: La obligación de visitar a su madre despierta en Beau un brote de locura.
DIVERSIÓN: | |
TERROR: | |
ORIGINALIDAD: | |
GORE: |
- 1/5
Voy a comenzar reconociendo el talento de Ari Aster en Hereditary y Midsommar para crear momentos de tensión y explorar los límites autorales de un género tan denostado por la crítica como es el terror. Él, junto a Eggers, se perfila como uno de los máximos exponentes de lo que se ha bautizado como "horror elevado"; la productora de sus films, A24, a su vez, se ha considerado como la cuna en la que residen los principales títulos de esta nueva etiqueta. Ahora, Aster y A24 han vuelto a unir fuerzas en la esperada Beau tiene miedo, cinta con un coste superior a los 60 millones de dólares que auguro será uno de los mayores fiascos comerciales del cine reciente y todo un suplicio para aquellos que, llevados por la admiración al director o a su protagonista Joaquin Phoenix, se acerquen al cine o, en un futuro próximo, den al Play de semejante bodrio con ínfulas de cine con mayúsculas.
La película nos propone ver el mundo desde la perspectiva de su protagonista, Beau. Aunque el guion no lo cuenta, los destellos luminosos de varios planos y los sonidos nos indican, desde las primeras escenas, que este personaje sufre de un transtorno mental serio, seguramente de una esquizofrenia. La noticia de la repentina muerte de su madre obligará al personaje a abandonar su pequeña zona de confort, su casa, e irá enredándose en diferentes aventuras en las que no sabremos qué hay de real y qué hay de imaginario. Así, durante tres horas de nuestra vida que no regresarán jamás, caeremos en las redes de un ejercicio narrativo donde sus brillantes ideas (que las hay) serán cubiertas por un tedio insondable que hace que esos 180 minutos se antojen como toda una vida.
Lo mejor: Treinta minutos iniciales y una secuencia central brillantes.
Lo peor: Tres horas que se antojan insoportables, reiterativas y que impiden aplaudir lo ingredientes positivos del film